4 momentos embarazosos en el sexo gay y cómo evitarlos
Está manchado... te ha pasado y LO SABES: cómo evitar 4 momentos EMBARAZOSOS en el SEXO GAY.
Alerta de spoiler: el sexo gay no es siempre como lo que ves en los vídeos porno gay. A veces pueden ocurrir determinados accidentes o suceder algunos inconvenientes que manchan (a veces literalmente) la experiencia. ¡La vida no es perfecta! Pero sí que hay que saber lidiar con esos momentos incómodos o evitarlos. En primer lugar tienes que considerar que estas cosas son normales y no hay que avergonzarse de ellas aunque a veces sean momentos un tanto embarazosos. Te hablamos sobre 4 momentos embarazosos en el sexo gay y cómo evitarlos.
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Pene manchado de mierda
Hablemos de las cosas tal y como son: te ha pasado o te va a pasar alguna vez durante la penetración anal, que el pene salga manchado de caca. Es una situación incómoda que puede evitarse a veces. Si eres el pasivo te recomendamos limpiarte analmente, ya sea en la ducha o usando algún artilugio para ello, hasta que el agua salga limpia de ahí. No hay que limpiarse de manera agresiva o meterse jabón por el culo, no hay que ser como Allen King. La dieta también influye. Si eres el activo y te sucede, intenta ser amable y comprensivo, porque el pasivo lo estará pasando fatal. Son cosas naturales.
Picores después de la depilación
Si tienes una cita con sexo gay, ten cuidado al depilarte en determinadas zonas porque los picores pueden ser muy incómodos. Métete en la ducha, no te depiles en seco, ya que el agua caliente ayudará a que todo vaya mejor e haya menos irritaciones. Tras depilarte aplica agua fría para cerrar los folículos y échate algo para aliviar la piel. Aun así cuando el vello vuelve a crecer es normal que tengas picores si no estás muy acostumbrado a la depilación. Nota: no tienes por qué depilarte, el vello es bello.
Correrse demasiado pronto
A veces la excitación es demasiado y uno de los dos eyacula antes de tiempo. Si notas que estás a punto de correrte y es demasiado pronto, intenta prestar más atención a tu pareja y menos a tu pene. Hazle una felación, juega con sus pezones, lame su cuello, hazle un beso negro... le darás mucho placer y harás que la relación no acabe antes de tiempo. Si sueles correrte siempre demasiado pronto, practica cuando te masturbes solo intentando detenerte antes de eyacular, parar un momento y seguir. Esa técnica te ayudará.
Tardar demasiado en correrse
El punto contrario: a veces es peor tardar mucho en eyacular que tardar poco. Algunos gays necesitan mucho tiempo para correrse y a menudo solo pueden hacerlo masturbándose ellos mismos. El sexo gay es maravilloso, pero alargado hasta el infinito cansa a cualquiera. Si te cuesta correrte, prueba nuevas cosas, como tener sexo gay en lugares que no son la cama, cambia de posturas, de roles... nuevas sensaciones pueden ayudarte a acortar tu llegada al clímax. ¡Sed creativos y no tengáis miedo a arriesgar!
