Amor y controversias en los JJOO de Par铆s 2024: El colectivo LGTBI en el centro de atenci贸n
Los Juegos Olímpicos de París 2024 no solo han destacado por la deportividad, sino también por la visibilidad del colectivo LGTBI, que se ha manifestado con el uso de los colores de la bandera arcoíris entre las naciones participantes. La ceremonia de apertura, marcada por una performance de drag queens, generó reacciones encontradas en sectores conservadores y ultraderechistas.
Este evento ha estado marcado por el orgullo del colectivo, representado por un número récord de 193 atletas que han salido del armario, según fuentes de OutSports, aunque la cifra sigue siendo baja en comparación con el total de 10,500 competidores en los Juegos.
Entre los momentos más comentados se encuentra el beso de celebración de la judoca italiana, Alice Bellandi, a su pareja, Jasmine Martin, que fue captado por la RAI y observando la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, conocida por sus comentarios homófobos. Bellandi reflexionó sobre la normalidad del amor en el deporte, subrayando: "Es amor. ¿A quién besarías después de lograr algo tan importante?".
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La estadounidenses Perris Benegas y el australiano Campbell Harrison también celebraron sus logros con gestos afectuosos hacia sus parejas, apoyando la idea de que el amor no debería ser motivo de controversia.
Entre las iniciativas del evento se encuentra la Pride House, inaugurada por primera vez por el Comité Olímpico Internacional, como un espacio para dar visibilidad a los atletas LGTBI. La historia también incluye encantadoras pedidas de mano, como la de la jugadora de rugby estadounidense Alev Kelter, quien propuso matrimonio a su novia tras ganar una medalla.
La boxeadora Cindy Ngamba, originaria de Camerún y refugiada por su orientación sexual, hizo historia al ganar una medalla para el Equipo Olímpico de Refugiados, enviando un mensaje de esperanza a otros en su situación.
El saltador olímpico Tom Daley se ha consolidado como un icono LGTBI durante estos juegos, luciendo la bandera del colectivo y siendo un símbolo de orgullo para muchos. Sin embargo, no todo ha sido positivo; la controversia por la boxeadora Imane Khelif ha traído a la luz bulos tránsfobos, generando una respuesta negativa entre los sectores más conservadores, quienes han cuestionado la equidad en las competiciones. El vocero del Comité Olímpico Internacional salió en defensa de Khelif, enfatizando la importancia de basar las opiniones en hechos y evitar la desinformación.
Una serie de eventos y gestos que han resaltado los desafíos y victorias del colectivo LGTBI en el contexto deportivo, ofreciendo así un espacio para la discusión y reflexión sobre la inclusión en el deporte.
