Brasil permite a gays donar sangre
El Tribunal Supremo de Brasil ha eliminado las restricciones impuestas durante décadas a los hombres homosexuales y bisexuales que donan sangre, en una decisión que ha sido aclamada como una victoria en materia de derechos humanos para las personas LGBT+ en el país. El tribunal dijo que la prohibición de que los hombres gays y bisexuales donen sangre es inconstitucional.
Los jueces votaron siete-cuatro a favor de levantar las restricciones el viernes (8 de mayo) que significaba que los hombres que tenían sexo con hombres tenían que permanecer célibes durante 12 meses antes de donar sangre, terminando el período de espera por completo. El Ministro del Tribunal Supremo Edson Fachin argumentó que la prohibición ofendía la dignidad humana básica de los hombres homosexuales y bisexuales.
"En lugar de permitir que el Estado promueva el bien mediante la donación de sangre, restringe indebidamente la solidaridad basada en el prejuicio y la discriminación", escribió Fachin en su voto, según Reuters. Brasil es el último país que ha levantado las restricciones a los hombres homosexuales y bisexuales que donan sangre, ya que la pandemia de coronavirus crea una inminente escasez mundial de suministros de sangre donada.
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Los EE.UU., Dinamarca, Australia e Irlanda del Norte también han relajado las restricciones a los hombres gays y bisexuales que donan sangre en los últimos meses. Pero los activistas LGBT+ han criticado duramente a estos países por seguir aceptando sólo sangre de hombres gays y bi que han permanecido célibes durante varios meses, incluso bajo las relajadas reglas.
Las normas sobre los hombres gays y bisexuales que donan sangre son un remanente de la crisis del SIDA, con los críticos criticando las restricciones como si estuvieran basadas en el estigma en lugar de la ciencia. El comportamiento sexual y los antecedentes de cada donante de sangre deben ser evaluados antes de que puedan donar sangre, dicen los defensores de levantar las normas por completo, en lugar de una prohibición general o un período de celibato para los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres.
El caso llegó a la Corte Suprema de Brasil en 2016, pero los jueces tardaron cuatro años en tomar una decisión. El matrimonio entre personas del mismo sexo es legal en Brasil, pero el presidente Jair Bolsonaro - que dio positivo en el test de coronavirus el mes pasado después de una reunión con Donald Trump - se ha autodenominado "homófobo orgulloso".
El año pasado, la oposición política en Brasil dijo que las "ideas machistas" de Bolsonaro son las responsables de promover la violencia contra las personas LGBT+ y las mujeres en el país. A pesar de la criminalización de la homofobia y la transfobia, Brasil es el país más mortífero del mundo para los transexuales. El presidente brasileño también dijo el año pasado: "Brasil no puede ser un país del mundo gay, del turismo gay. Tenemos familias".
