¿Cómo es ser un sumiso gay?

¿Te va más ser un GAY DOMINANTE o un GAY SUMISO? Te contamos cómo es ser SUMISO GAY.

En el mundo del sexo gay hay multitud de posibilidades y variantes. Muchas de ellas también existen en el sexo heterosexual, pero si generalizamos quizás ellos no son tan abiertos de mente o no están dispuestos a explorar ciertas prácticas poco comunes. El éxito de '50 Sombras De Grey' ha hecho que muchas personas descubran el mundo del sadomaso, la dominación y la sumisión, mundo que casi todos los gays ya conocían aunque no lo hubieran practicado o no hubieran llegado a ciertos extremos, más allá de un azote o unas esposas. Existen relaciones gay cuya dinámica se basa en la dominación y la sumisión, y no solamente en el sexo. Te contamos cómo se vive desde uno de los lados. ¿Cómo es ser un sumiso gay?

¿Cómo es ser un dominante gay?

¿Cómo es ser un esclavo gay en la cárcel?

Antes de hablar de ser sumiso gay hablemos de BDSM. A veces nos referimos a BDSM como sadomaso, pero el término BDSM fue creado para agrupar a distintas prácticas sexuales y eróticas: bondage, dominación, sumisión y masoquismo forman las siglas BDSM, aunque la "d" también puede referirse a "disciplina" y la "s" a "sadismo". Hay gente que las llama "sexualidades alternativas", pero hay que explicar que estas prácticas pueden ir más allá del terreno sexual y ser consideradas un estilo de vida. También debemos señalar que se practican libremente, no confundamos el BDSM con abusos o violaciones.

En una relación un sumiso gay se complementa con un dominante gay o varios, es decir, que el sumiso gay se somete a los deseos y órdenes de su pareja o de una o más personas. Hablamos de sexo en el que el sumiso gay hace todo lo que le pide el otro, pero también de vivir bajo las órdenes de otro hombre al que el sumiso desea complacer en todo momento, no solo sexualmente. El sumiso gay mantiene prácticas sexuales bajo el control del gay dominante, que hace cumplir siempre su voluntad. El sumiso gay se limita a obedecer y dejar que hagan con su cuerpo lo que quieran, pero recordemos que esta posición de sumisión es voluntaria y el sumiso gay llega a ella porque le produce placer estar en ella.

Lo más habitual en este tipo de relaciones de sumisión, o al menos las que más vemos representadas en el porno gay, es que el sumiso gay sea el pasivo, el más joven, delgado y menos masculino, mientras que el gay dominante es mayor, activazo, fornido, musculoso y un macho alfa que es el que manda. Sin entrar a cuestionar estas dinámicas, sí es cierto que a muchas personas les excitan las relaciones de dominación y sumisión y todos lo hemos visto en ciertos perfiles de Grindr. Hay gays que buscan un amo que les domine y otros gays que buscan esclavo. Amo y esclavo también son términos que se usan para describir estas relaciones, aunque algunos gays dominantes prefieren utilizar otros términos y exigen que el sumiso gay se dirija a ellos como "señor", "rey" o similares.

El sumiso gay puede interrumpir o pausar la situación si así lo desea, para lo cual suele usarse una palabra clave o de seguridad. Generalmente este tipo de relaciones vienen asociadas a prácticas sexuales más extremas, como el uso de juguetes sexuales, mordazas, cadenas, correas, dildos enormes... fisting, orgías, etc. En algunas celebraciones del Orgullo LGBT o en algunas fiestas gays habrás visto parejas en las que un gay lleva a otro encadenado o lo saca a pasear como si fuera un perro, incluyendo máscara de perro de cuero y otros ornamentos de cuero con un marcado estilo sadomasoquista.

No es tan popular, pero también existe el caso de las parejas gay a la que les gustan las relaciones de dominación y sumisión, pero que no se limitan a adoptar siempre el mismo rol. Es lo que se conoce como switch o versátil, pero no nos referimos solamente a que a los dos les guste penetrar y ser penetrados, sino que también les gusta dominar y ser dominados, ser amos y ser sumisos gay. En una misma sesión pueden llegar a adoptar esos dos roles. Y a ti, ¿te gusta ser sumiso y / o dominante?