El gobierno malayo ordena devolver relojes LGBTQ+ de Swatch incautados
El gobierno malayo ha sido ordenado a devolver cientos de relojes, fabricados en los diferentes colores del arcoíris, después de haber sido incautados por contener "elementos LGBTQ".
Un tribunal en el país del sudeste asiático ordenó al gobierno devolverlos al fabricante suizo de relojes Swatch después de que fueran incautados en mayo de 2023.
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El ministro del interior, Saifuddin Nasution, declaró que el equipo legal del gobierno estaba revisando "la base del fallo" antes de considerar si apelar.
El gobierno debe "respetar la decisión" o de lo contrario enfrentar un desacato al tribunal, agregó.
Las autoridades deben devolver los artículos dentro de 14 días, dijo el fiscal del gobierno, Mohammad Sallehuddin Md Ali, al Tribunal Superior de Kuala Lumpur.
La homosexualidad ha sido ilegal en Malasia desde el siglo XIX y es castigable con hasta 20 años de prisión, multas y azotes. La censura es común y está impuesta por el estado, utilizando cláusulas de la Ley de Prensa y Publicaciones de 1984. Las películas, la televisión y los medios que contienen temas LGBTQ+ están estrictamente prohibidos.
El tribunal dictaminó que la confiscación de los relojes no estaba justificada porque una ley que prohibía su venta fue aprobada únicamente después de que fueron incautados.
Aunque los relojes fueron devueltos al fabricante, una orden que prohíbe su venta bajo las leyes de censura del país significa que no pueden ser revendidos. La empresa de relojes afirmó en su demanda que su negocio había sufrido "inmediatamente después" de las incautaciones.
“Nos preguntamos cómo el equipo de aplicación del ministerio del hogar confiscará los muchos hermosos arcoíris naturales que aparecen miles de veces al año en el cielo de Malasia”, dijo el ejecutivo del grupo Swatch, Nick Hayek, en ese momento.
Como parte de una campaña publicitaria, Swatch describió los relojes como "estridentes, orgullosos, edificantes y llenos de significado".
Cuando se le preguntó sobre la incautación el año pasado, el primer ministro Anwar Ibrahim declaró: "El único hecho que conozco es que la confiscación fue porque los relojes tenían símbolos LGBTQ, no por los colores".
