El saltador olímpico de pértiga cuya entrepierna frustró sus esperanzas de medalla 'ofreció 250.000 dólares' por entrar en un sitio para adultos
El saltador de pértiga olímpico Anthony Ammirati, cuyos sueños de medalla fueron finalmente aplastados cuando su entrepierna desalojó la barra del salto con pértiga durante las eliminatorias de París 2024, ha recibido al parecer una oferta de 250.000 dólares por unirse a un sitio para adultos.
Según TMZ Sports, el sitio porno CamSoda ha hecho una oferta al deportista francés después de que sus genitales rozaran el listón durante una eliminatoria el pasado 3 de agosto.
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El choque hizo que la barra cayera a la colchoneta, dejando al francés en 15ª posición, y provocando que los espectadores instaran a la estrella del deporte a "llamar a una drag queen" antes de su próximo salto para que le enseñen a "remetirse". Este procedimiento, utilizado habitualmente por drag queens y transexuales, tiene por objeto aplanar los genitales para crear líneas suaves en la ropa y afirmar el propio género.
Anthony Ammirati falló la barra y a los comentaristas claramente les está costando reconocer lo sucedido 😂 AYUDA ME MUERO pic.twitter.com/5hOHttVA5g-
Gladys Wotching (@Glodyswotcher) 3 de agosto de 2024
El medio informó de que el vicepresidente de la empresa, Daryn Parker, dijo: "Si de mí dependiera, te premiaría por lo que todo el mundo vio, tu talento por debajo del cinturón."
Parker continuó: "Como amante de las actividades centradas en la entrepierna, me encantaría ofrecerte hasta 250.000 dólares a cambio de un show de 60 minutos con webcam, en el que muestres tus bienes, menos el travesaño, por supuesto."
Ammirati había hablado previamente con la Federación Francesa de Atletismo sobre el percance, pero no llamó más la atención sobre sus regiones inferiores.
"Es una gran decepción, porque no me perdí nada en el tercer intento, a 5,70 metros. Lo que sí eché en falta fue un poco de salto en el entrenamiento para afinar los reglajes. Sólo una sesión técnica.
"Estaba físicamente [preparado] al cien por cien. Las condiciones eran buenas. Es la primera vez que empiezo una competición sin estrés. Como total outsider, sólo tenía un objetivo: jugar con el público. Casi lo conseguí".
