Freud pensaba que la terapia de conversión era un disparate

Un historiador queer ha explicado que la práctica de la terapia de conversión siempre ha sido tan indefendible que incluso el primer psicoterapeuta Sigmund Freud era un "aliado".

El historiador queer Sacha Coward declaró en el documental de la BBC Radio 4 Faith, Lies and Conversion Therapy que la terapia de conversión no se convirtió en una práctica común hasta la década de 1930.

"Pensaba que era hetero hasta que un hombre lo cambió todo"

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Dijo: "La homosexualidad, la no heteronormatividad, las personas no cisgénero han sido discriminadas prácticamente desde siempre. Los orígenes de la terapia de conversión, la idea de que uno puede sentarse y, mediante un proceso, transformar la identidad sexual o de género de alguien a la "aceptada", surge de forma más destacada en torno a la década de 1930. Es entonces cuando aparece este enfoque psicodinámico".

Hoy en día, es obvio para la mayoría de la gente que la terapia de conversión no es eficaz para cambiar la identidad de género o la orientación sexual de una persona. Pero Coward explicó que, incluso en los primeros tiempos de la terapia de conversión y a lo largo de su historia, esta práctica siempre se ha considerado poco científica, incluso por "famosos psicoterapeutas como Freud".

Aunque la práctica de la psicoterapia y la vida personal de Freud fueron horribles y perturbadoras en muchos aspectos, cuando se trataba de la terapia de conversión era un "aliado incondicional", dijo Coward.

"Hay un ejemplo en el que Freud recibe una carta de una madre preocupada, hablando de su hijo que le preocupa que sea gay. Él le contesta, y en realidad en algunos aspectos es un aliado bastante firme. Dice que ser gay no es una enfermedad, no es un trastorno, no es algo que se pueda tratar necesariamente".

Sin embargo, Freud cuestionó que ser gay pudiera ser el resultado de una "ansiedad no resuelta", por lo que muchos otros profesionales de la salud mental "se aferraron a esto", dijo Coward.

Continuó: "Empiezan a creer que a través del enfoque psicodinámico, la llamada 'cura hablada', se podría cambiar a un hombre gay en un hombre heterosexual, o a una mujer bisexual en una mujer heterosexual".

La homosexualidad fue declarada enfermedad mental, sin ninguna prueba, en 1952 por la Asociación Americana de Psicología (APA), tras la publicación de la carta de Freud.

Coward dijo: "Era diferente. Y sólo porque era diferente, tenía que estar mal, y por lo tanto tenía que ser una enfermedad".

Pero en 1957 se publicó un informe de la doctora Evelyn Hooker, psicóloga estadounidense, en el que se demostraba que las personas LGBT+ no mostraban realmente ningún signo de enfermedad mental por el hecho de serlo.

"En cierto modo, demostró que toda la idea de considerar la homosexualidad como un trastorno mental era errónea, porque no había ningún trastorno", dijo Coward.

"La publicación del informe de Hooker fue "bastante reprimida" hasta 1970, dijo, lo que supuso 14 años de métodos de terapia de conversión cada vez más invasivos, como lobotomías, castración química, terapia de aversión y terapia electroconvulsiva (TEC).

Sin embargo, no había pruebas de que ninguno de estos supuestos "tratamientos" fuera eficaz.

El Dr. Qazi Rahman, que estudia las "bases biológicas de la orientación sexual", también habló con el documental de la BBC 4, explicando que mientras que incluso en la época de Freud no había pruebas para la terapia de conversión, ahora tenemos aún más pruebas de que "curar" la orientación sexual o la identidad de género de alguien es imposible.

Rahman dijo: "La orientación sexual es un patrón de deseo, no un patrón de comportamiento o de actos sexuales per se... Ese patrón de deseo no puede cambiarse por simple voluntad, o actuando de una manera particular.

"El comportamiento puede, absolutamente. Puedes elegir tus parejas sexuales, puedes elegir estar casado, pero cambiar el patrón real de deseos sexuales de uno no es posible."

Lo que sí tenemos es la evidencia de lo perjudicial que es, pero todavía no se ha prohibido esta práctica en el Reino Unido.

Más de dos años y medio después de que los tories se comprometieran en 2018 a "erradicar" esta abominable práctica en el Reino Unido como parte de su Plan de Acción LGBT+, se han hecho muy pocos avances medibles.

El lunes (8 de marzo), Kemi Badenoch pronunció un discurso en un debate parlamentario sobre la terapia de conversión, y se le reprocharon sus comentarios "extremadamente preocupantes", al no dar ninguna línea de tiempo, no mencionar ningún aspecto específico relacionado con la posible legislación y negarse repetidamente a utilizar la palabra "prohibición".

Desde entonces, tres miembros del Grupo Consultivo LGBT+ del gobierno han abandonado sus puestos por la inacción del gobierno respecto a la terapia de conversión y la "hostilidad" hacia la comunidad LGBT+.