La justicia europea pide perseguir los delitos de odio
La justicia europea de Derechos Humanos le ha dado la razón a una pareja homosexual de Lituania que denunció la pasividad de su país con los delitos de odio LGTBIfóbicos.
Mingirdas Levickas y Pijus Beizaras, una pareja de activistas de Lituania, en 2014 publicaron una foto de los dos besándose con motivo de su aniversario y como reivindicación. Su publicación género más de 800 comentarios, la inmensa mayoría eran insultos, otros amenazas de muerte. Con la asistencia de la Liga Gay Lituana, denunciaron una parte de estos comentarios recibidos, por delitos de odio. El fiscal de su ciudad, ni siquiera se molestó en investigar los hechos por no apreciar una intencionalidad, requisito necesario para que se considere delito de odio, según la legislación lituana.
La justicia europea permite prohibir a los homosexuales donar sangre
El silencio ante los delitos de odio LGTB+ es un problema
La LGL recurrio, pero se les volvió a rechazar la demanda por no considerar delitos los comentarios recibidos. De hecho la justicia lituana llego a culpar a la propia pareja por la situación generada. Al ver que la justicia de su país no les iba a ayuda sino a culpar, llevaron el caso al tribunal europeo. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos tomo las riendas del caso y el martes pasado dieron su veredicto, dando la razón a la pareja y fijando una indemnización de 10.000€, por los delitos de odio recibido y el coste del proceso vivido.
Ahora el tribunal Europeo recuerda la obligación que tienen todos los miembros de la Unión Europea de proteger a sus comunidades LGTB frente a los delitos de odio y agresiones que siguen sufriendo.