La mayoría de las personas seropositivas tienen más de 50 años

La mayoría de las personas que viven con el VIH en Estados Unidos tienen más de 50 años, y la cifra no hará sino aumentar. Según los CDC, algo más del 50% de las personas seropositivas tienen más de 50 años, pero en 2030 esa cifra podría ascender al 70%.

Esto se debe en gran medida al éxito de la medicación antirretrovírica. Las personas diagnosticadas de VIH mueren cada vez menos.

Hace más de 50 años, las mujeres trans debatían en la BBC sobre los derechos de las personas trans.

Continúa el estigma hacia las personas seropositivas

Por lo tanto, tiene sentido que las personas diagnosticadas a los 30 o 40 años en las dos últimas décadas tengan más probabilidades de seguir existiendo, pero ahora se encuentran en la franja de edad de más de 50 años.

Lo que no significa es que el VIH sea sólo un problema de las personas mayores.

Queerty informó recientemente sobre las últimas cifras de infección por VIH de los CDC. Sus cifras para 2021 mostraron un descenso significativo con respecto a 2019, en el que la PrEP desempeñó un papel importante.

Alrededor de dos tercios de las nuevas infecciones por VIH en 2021 se produjeron entre hombres homosexuales y bisexuales. Por edades, la mayoría (9.100) se produjeron entre personas de 25 a 34 años, seguidas por las de 13 a 24 años (4.900) y las de 35 a 44 años (4.000).

Alrededor de 8.000 de los diagnósticos correspondieron a personas de 45 años o más.

Aproximadamente una de cada ocho personas en Estados Unidos no sabe que tiene el VIH. Algunos estudios sugieren que los gays de más edad son menos propensos a someterse regularmente a la prueba del VIH.

"Necesitamos más investigación"

Aunque los medicamentos hacen que las personas infectadas por el virus lleven una vida larga y sana, es necesario investigar más para determinar el impacto del VIH en las personas mayores. Así lo cree el gerontólogo Michael Pessman, que escribe en Next Avenue.

"La atención y la investigación sobre el VIH se enfrentan a nuevos retos", afirma. "Las personas mayores que viven con el VIH también tienen un mayor riesgo de demencia, osteoporosis, fragilidad y algunos cánceres. También pueden tener más probabilidades de sufrir caídas. Es frecuente que las personas mayores con VIH padezcan enfermedades mentales, sobre todo depresión y adicción, y tienden a estar más aisladas.

"A medida que la población envejece, necesitamos más investigación sobre el VIH y el envejecimiento para mejorar su atención y tratamiento".

La administración Biden mantiene su compromiso de intentar acabar con la transmisión del VIH para 2030. La mayoría de los defensores creen que sigue siendo un objetivo optimista. Los CDC afirman que las desigualdades sanitarias siguen siendo un gran obstáculo. El VIH sigue afectando de forma desproporcionada a los hombres homosexuales y bisexuales negros e hispanos.

Al centrarse la atención en acabar con la transmisión del VIH, a menudo se pasa por alto la investigación sobre los retos que afrontan quienes ya viven con el virus.

VIH y envejecimiento acelerado

Un estudio publicado el año pasado reveló que la infección por VIH tiene un impacto "temprano y sustancial" en el proceso de envejecimiento.

Los investigadores descubrieron que este impacto negativo se producía en los primeros 2-3 años de infección. Advirtieron de que, incluso con tratamiento, las personas infectadas podían perder hasta cinco años de vida. La reducción media de la esperanza de vida fue de entre 1 y 3 años. La situación empeoraba si la persona pasaba más tiempo antes de recibir el diagnóstico.

El estudio analizó el ADN y marcadores específicos del envejecimiento. Se quería explorar por qué algunos supervivientes a largo plazo del VIH experimentaban tasas más elevadas de cardiopatías y otras afecciones. Las personas con VIH también se ven afectadas de forma desproporcionada por el cáncer anal.