Los pasos de cebra LGBT en París se quedan para siempre
Los pasos de cebra LGBT en París se quedan PARA SIEMPRE.
París ha celebrado el mes del Orgullo de una forma preciosa: marcando los pasos de cebra con nuestra bandera arcoiris, representando a todos los colores y espectros de la comunidad LGBT. Hasta ahí bien, pero como pasa siempre que hay algún tipo de muestra de apoyo al colectivo, los homófobos se sienten ofendiditos y tienen que llamar la atención de alguna manera. ¿Qué hicieron? Vandalizar las banderas arcoiris echando pintura encima y graffitis demostrando que ellos no estaban de acuerdo con la igualdad de derechos.
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Dos veces lo hicieron y dos veces las repararon, pero lo más interesante de la historia viene ahora: después de tanta polémica, la alcaldesa de París Anne Hidalgo ha tomado una decisión que va a gustar a muchos y va a cabrear a unos otros: de momento, los arcoiris se quedan en los pasos de cebra de forma permanente e ininterrumpida.
Los duros mensajes con los que pintaron los pasos de cebra el 25 y 28 de junio decían cosas como "LGBT fuera de Francia" o "dictadura LGBT". Está claro que estos homófobos, que siempre han tenido el viento a su favor, se sienten pequeños y asustados cuando ven que un colectivo tan minoritario del que se reían hace tan solo unos pocos años está ganando fuerza, derechos y libertades. Eso les acojona, porque están dejando de ser los machos alfa del lugar y ya nadie les presta tanta atención como antes.
Nos parece un acto muy positivo por parte del ayuntamiento de París para luchar contra la discriminación. Y ellos, los homófobos, digámoslo claro: que se jodan. Si se hubieran comportado, el Pride Month hubiera durado eso mismo, un mes, pero como son catetos y analfabetos, se merecen tener el arcoiris en la cara el tiempo que haga falta.