Madonna arrasa en su primera noche en Barcelona con el 'Rebel Heart Tour'
BARCELONNA: Madonna llega a Barcelona y lo da TODO.
Madonna ha vuelto con todo lo que esperábamos de ella y más: energía, baile, una puesta en escena espectacular y algo que hace mucho que echábamos de menos: algo de improvisación, interacción con el público y un catálogo de canciones envidiable.
Madonna arrasa en su primera noche en Barcelona
Madonna expande su 'Rebel Heart Tour' con más fechas
La Reina del Pop ha aterrizado en el Palau Sant Jordi de Barcelona una hora y media tarde, debido sobre todo a los estrictos controles de seguridad. Nunca antes un concierto había sido tan organizado, aunque con ello conllevara retrasos. Barcelona se ha blindado este martes ante cualquier ataque, teniendo en cuenta que el Fútbol Club Barcelona también jugaba un partido.
Pero volviendo a lo que nos interesaba: Madonna ha vuelto a Barcelona por quinta vez y no nos ha decepcionado en absoluto. Ha cantado sus mayores hits de los 80, algunos detallitos de los 90 y 00 y mucho 'Rebel Heart', que para algo es la gira que promociona su último disco. La hemos visto pasar de samurai guerrera en 'Iconic' a una rockera de manual en 'Burning Up', mientras en la pantallas se fundía el metal de los crucifijos/barra de striptease en los que iba a bailar disfrazada de monja en 'Holy Water'. La hemos visto blasfemar mientras un bailarín negro le hacía una "última cena" de lo más apetitosa y también hemos disfrutado de su amor por los coches y los que los arreglan con 'Body Shop'.
La parte gitana ha sido más intensa de lo habitual, ya que por fin la frase en la que menciona Barcelona de 'Dress You Up' ha cobrado sentido, aunque no nos la ha querido explicar. Ha interactuado con el público, nos ha regalado el medley de los 80 gitanos, el 'Who's That Girl' que ha coreado el público y una versión de 'Don't Tell Me' con errores en las estrofas. Y eso que se ha pasado la mañana ensayando 'Secret', que al final no ha sonado.
El invitado sorpresa no lo ha sido tanto: Jon Kortajarena ha bailado como un rey en el escenario y por primera vez desde que Madonna saca a sus famosos al escenario, no le ha dado una banana, sino una manzana, porque todos sabemos que Madonna se vuelve loca con Jon, que apareció en el vídeo de 'Bitch I'm Madonna'.
La despedida, por todo lo alto y sin mojarse: ni bandera española ni catalana. Se queda con la del Barça, que seguro que cabreará a muchos madridistas pero, ¿cuantos futboleros había en la sala? Mejor ni contarlos.
Madonna nos ha traído un show en el que la música vuelve a ser la protagonista por encima del espectáculo. Ha confeccionado un concierto en el que pueda sentirse cómoda sin olvidar los momentos sorprendentes como la coreografía de 'Iconic' o la de 'Holy Water'. Pero lo más importante: la vemos relajarse, divertirse, no estar tan pendiente del siguiente paso de baile y eso se contagia. Madonna nos divierte, lo ha hecho en Barcelona esta noche y lo volverá a hacer mañana sin duda alguna. No hagas caso a quién critique el 'Rebel Heart Tour', Madonna está más en forma que nunca y cuéntanos si te gustaría estar así a los 57 años.
