Nueva normativa olímpica sobre atletas trans
El Comité Olímpico Internacional (COI) ha vuelto a retrasar sus directrices sobre transexualidad en el deporte debido a "opiniones muy encontradas".
Se espera que las nuevas directrices para las federaciones deportivas internacionales no se publiquen hasta después de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín, en febrero de 2022, tres años más tarde de lo previsto inicialmente.
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La noticia fue revelada por el director científico y médico del COI, el Dr. Richard Budgett, quien dijo que el próximo asesoramiento "dará prioridad a la inclusión" y "evitará el daño".
Las directrices actuales publicadas en 2015 permiten a las mujeres trans competir en la categoría femenina si mantienen su nivel de testosterona total por debajo de 10 nanomoles por litro durante 12 meses.
Desgraciadamente, estas normas generales hicieron que las velocistas namibias Christine Mboma y Beatrice Masilingi, ambas mujeres cisgénero, se vieran obligadas a abandonar las pruebas olímpicas debido a sus altos niveles naturales de testosterona.
Budgett admitió a principios de este año que el sistema actual "no es apto para el propósito" y necesita ser revisado: "Lo acepto absolutamente, las cosas avanzan", dijo.
"En su momento se fijaron los 10 nanomoles por litro porque pensábamos que era el nivel más bajo para los hombres [cisgénero]. Ahora sabemos que bajan a siete y que las mujeres [cisgénero] también pueden ser más altas".
Tras intervenir en una conferencia del Consejo de Europa sobre la protección y la promoción de los derechos humanos de los atletas intersexuales y trans en las competiciones deportivas, Budgett dijo que el enfoque del COI pasaría a ser más individualizado y específico para cada deporte.
Habrá directrices generales de alto nivel, más bien un marco", dijo, "y serán las federaciones internacionales las que determinen las normas específicas para sus deportes y eventos".
"Los cambios particulares a partir de 2015 son el énfasis en la prioridad de la inclusión, y en evitar el daño, pero siempre teniendo en cuenta la importancia de la competencia justa y significativa.
"Todavía tenemos que ponernos de acuerdo sobre el marco. Es un reto. Pero se publicará dentro de unos meses, a más tardar justo después de los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín".
Y continuó: "Somos muy conscientes de que el sexo, por supuesto, no es binario. Es un continuo. Los sectores se superponen. Y por eso las soluciones no van a ser esencialmente binarias".
Este nuevo enfoque reconoce que no existe una estrategia única para el deporte, añadió Budgett. En el futuro, dependerá de cada deporte encontrar el "punto óptimo" entre seguridad, equidad e inclusión.
"Las mujeres transgénero son mujeres", dijo, "pero también tenemos que separar el género de la elegibilidad. Y la elegibilidad debe ser específica de cada deporte para que la competición sea justa y significativa en todos los niveles, pero especialmente en la élite, donde lo que está en juego es mucho más importante".
"Habrá criterios diferentes para los distintos deportes. Si comparamos el tiro con arco con el hockey y el remo, requieren habilidades muy diferentes. Y es poco probable que un atleta de élite de uno sea un atleta de élite en otro. Y tenemos que determinar qué es realmente una ventaja desproporcionada o insuperable".
