Queman la casera arcoiris de Long Beach en EEUU
La caseta de los socorristas de Long Beach antes y después de quemarse (Foto: @RobertGarcia/Twitter)
Una querida caseta de socorrista pintada con el arco iris en Long Beach, California, ha ardido hasta los cimientos. El alcalde gay de la ciudad sospecha que podría tratarse de un incendio provocado por el odio.
La cabaña se pintó con los colores del arco iris para conmemorar el Mes del Orgullo el año pasado. Los bomberos fueron llamados para hacer frente al incendio justo después de la medianoche del martes.
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"La torre servía como símbolo de nuestro firme apoyo a la diversidad dentro de nuestras filas y a la comunidad LGBTQ que llama a Long Beach su hogar", dijo el jefe de seguridad marítima de Long Beach, Gonzalo Medina, a Los Angeles Times. "La torre será reemplazada y repintada por los socorristas".
Long Beach tiene un alcalde gay: Robert García. Tomó Twitter para decir que tenía pocas dudas de por qué se había quemado la cabaña.
"Anoche, nuestra estación de socorrismo PRIDE que fue pintada por socorristas LGBTQ+, se quemó. El incendio está siendo investigado, pero personalmente tengo pocas dudas de que fue un acto de odio. A quienquiera que haya cometido este acto, lo reconstruiremos mejor y más brillante".
Anoche, nuestra estación de salvavidas PRIDE que fue pintada por salvavidas LGBTQ+, se quemó. El incendio está siendo investigado pero personalmente tengo pocas dudas de que fue un acto de odio. A quienquiera que haya cometido este acto, lo reconstruiremos mejor y más brillante. pic.twitter.com/VxNQZgCBpF
- Robert Garcia (@RobertGarcia) 23 de marzo de 2021
Entre los que respondieron al tuit del alcalde se encontraba una mujer que había captado imágenes del incendio.
Qué tristeza. Lo vi mientras sucedía. pic.twitter.com/Ofpt8Q4k90
- Jennifer Pruitt (@Jenisey123) 23 de marzo de 2021
García declaró a Los Angeles Times que era la primera vez que se quemaba una caseta de salvamento en 60 años. No creyó que fuera una coincidencia que le ocurriera a la caseta del arco iris, y señaló que ninguna de las casetas tiene su propio suministro de energía, por lo que no pudo deberse a un fallo eléctrico.
"Que el único puesto de socorrismo que se ha quemado sea el que se ha pintado recientemente con los colores del orgullo, deja pocas dudas de que se trata de un incidente dirigido", dijo García.
"Como hombre gay que también es alcalde de una ciudad, entiendo que los incidentes de odio siguen ocurriendo. Le ocurren a gente que conozco y me han ocurrido a mí.
En una rueda de prensa celebrada ayer, García prometió que la cabaña volvería.
"A quienquiera que haya cometido este acto: por favor, sabed que, uno, no sois bienvenidos en nuestra ciudad. Y, dos, que reconstruiremos la estación de socorrismo más brillante, más alegre y más grande que antes".
La caseta estaba hecha de acero y fibra de vidrio. Dave Stollery, director general de Industrial Design Research, empresa especializada en torres de salvamento de fibra de vidrio, declaró al Long Beach Post que la fibra de vidrio no es especialmente inflamable y que, por tanto, también le resultaba difícil creer que el incendio fuera accidental.
"Creo que en los 30 años que llevo en este negocio, nunca hemos oído hablar de una torre de salvamento en llamas".