Se casa la primera pareja gay en Chile

En una buena noticia poco frecuente, Chile dio la bienvenida a los primeros recién casados del mismo sexo al entrar finalmente en vigor la ley de matrimonio igualitario del país.

Con sus dos hijos en brazos, Javier Silva y Jaime Nazar intercambiaron sus votos antes de compartir un beso en el Registro Civil de Providencia de Santiago, la capital de Chile, en un momento histórico para el país mayoritariamente católico.

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La pareja, que lleva seis años juntos, soñaba con casarse, no sólo para celebrar su amor, sino para tener un estatus legal completo como padres, dado que las leyes conservadoras del país sudamericano les han puesto trabas durante mucho tiempo. Tienen dos hijos, Clemente, de 20 meses, y Lola María, de cuatro.

Junto a Silva y Nazar, el jueves 10 de marzo por la mañana, estaban Consuelo Morales Aros y Pabla Heuser Amaya. Juntos desde hace 16 años, la pareja se casó por razones similares, dijeron a la BBC, por su hija de dos años, Josefa.

Si bien las personas queer en Chile pueden contraer uniones civiles desde 2015, los beneficios de la unión quedan muy lejos del matrimonio, especialmente en lo que respecta a los niños.

Dado que Aros y Amaya tuvieron a Josefa mediante fecundación in vitro, sólo la mujer que dio a luz (Amaya) fue reconocida legalmente como madre biológica de su hijo.

Esto prácticamente impedía a Aros tener cualquier tipo de decisión legal sobre la atención médica de su hija. Si alguna vez se separaban, tampoco tendría la custodia de Josefa.

Ahora, las parejas han contraído matrimonio en una ceremonia que culmina una batalla de años por la igualdad matrimonial. Presentado por la presidenta de izquierdas Michelle Bachelet en 2017, un proyecto de ley para legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo menguó durante cuatro años en el Congreso antes de ser finalmente aprobado el pasado diciembre.

Por abrumadora mayoría en ambas cámaras, los legisladores votaron a favor de la igualdad matrimonial, convirtiendo a Chile en la 31ª nación en hacerlo en el mundo y en el octavo país latinoamericano en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Pero la forma en que Chile llegó a la legalización de la igualdad matrimonial fue chocante. El Presidente Sebastián Piñera, del partido liberal conservador Renovación Nacional, sorprendió a la clase política y a la Iglesia católica en junio cuando se pronunció a favor de la unión, algo a lo que se había opuesto durante mucho tiempo.

Los ministros de Gobierno, entre ellos el de Justicia, Hernán Larraín, y la de Desarrollo Social, Karla Rubilar, asistieron a las históricas ceremonias, en las que se entregó a los recién casados la primera libreta de matrimonio inclusiva de Chile, sustituyendo las palabras "marido" y "mujer" por "cónyuge", según el Registro Civil.

La noticia será un alivio para las cerca de 300 familias LGBT+ que esperan casarse para que sus hijos sean reconocidos legalmente, según la Fundación Iguales, un grupo de derechos LGBT+.

"Desde hoy, Chila tiene 'marido y marido' y 'mujer y mujer'", tuiteó el Movilh, la principal organización de derechos LGBT+ de Chile. "No más discriminación. Viva Chile".

"Hoy afirmamos con fuerza que el amor es amor", escribió Lorena Recabarren, la subsecretaria de Derechos Humanos, "reconociendo a todas las familias, independientemente de su orientación sexual".