Sólo el 1% de los adolescentes trans transicionan tras iniciar un tratamiento médico, según un estudio
Según un nuevo estudio, sólo el 1% de los adolescentes trans transicionan tras iniciar un tratamiento médico como bloqueadores de la pubertad o terapia hormonal sustitutiva.
Una investigación publicada en la revista médica Jama Pediatrics a principios de este mes reveló que de todos los menores de 18 años remitidos a un servicio de género juvenil en Australia entre 2014 y 2020, solo el uno por ciento se desvinculó tras comenzar a recibir tratamiento médico como hormonas o bloqueadores de la pubertad.
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En el estudio participaron 548 menores de 18 años remitidos al Servicio de Diversidad de Género del Servicio de Salud Infantil y Adolescente del Hospital Infantil de Perth -el único servicio de Australia Occidental- durante ese periodo.
Mientras que 29 pacientes (5,3%), según los informes, volvieron a identificarse con su sexo registrado al nacer antes o durante su evaluación, sólo dos (menos del 1%) lo hicieron después de empezar a recibir bloqueadores de la pubertad o un tratamiento hormonal similar.
Esto significa que más del 99% de los que siguieron el tratamiento con bloqueadores de la pubertad no abandonaron el tratamiento ni se arrepintieron de su elección.
El estudio concluyó que "se necesitan estudios longitudinales de seguimiento, que incluyan autoinformes cualitativos, para comprender las diferentes vías de la experiencia de la identidad de género".
Los resultados parecen desmentir las afirmaciones de los grupos antitrans estadounidenses de que debería prohibirse el tratamiento médico físicamente reversible, incluidos los bloqueadores de la pubertad, para los adolescentes trans por temor a que puedan arrepentirse de la decisión más adelante.
Este argumento se ha utilizado para justificar la prohibición del tratamiento hormonal en al menos 22 estados de EE.UU., entre ellos Texas, Arizona y Oklahoma, según una investigación de Human Rights Campaign (HRC) de noviembre.
Se cree que al menos el 35,1% de todos los jóvenes trans viven en estados que han aprobado la prohibición de la asistencia para la afirmación de género.
