Sudáfrica gay: ¿es un país seguro para el turismo gay?
Sudáfrica gay: ¿es un país seguro para el turismo gay?
Dentro de lo que supone viajar a África, sin duda el país más avanzado y en el que más podemos esperar que la tolerancia y el respeto por la comunidad LGBt haya avanzado es sin duda Sudáfrica. Sin duda es un país de contrastes, lleno de la magia de los paisajes increíbles del continente, aunque sin duda con muchos remanentes de tiempos pasados. No hace tanto tiempo que era un país menos avanzado y por ello es importante conocerlo bien si queremos viajar como turistas gays.
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Pero ¿existe una zona segura para mostrar tu homosexualidad? Es decir, ¿existe un lugar en el que puedes ir de la mano de tu pareja o encontrarte con otros hombres sin miedo a ser juzgado, detenido o atacado por ello? Ven a descubrir lo que te espera en Sudáfrica si te animas a viajar de vacaciones.
Sin duda el turismo gay ha llegado para quedarse. Supone el 10% del movimiento de viajeros en todo el mundo y los países, sus oficinas de turismo y las propias empresas lo saben, por lo que no van a darle la espalda a un caramelo tan importante como es el turista homosexual. Un turista que probablemente se deje más dinero de la media, que disfrute tanto del día como de la noche y que no se mire tanto el bolsillo a la hora de disfrutar de su visita al país en cuestión.
Sudáfrica no puede ser ajena a todo este boom, por ello ha conseguido que la ciudad más importante del país, Ciudad del Cabo, se haya convertido en una especie de meca gay para el turismo LGBT, un lugar en el que además de contar con los puntos clave turísticos de toda la vida, también tienen sitio las personas LGBT. Y su dinero, claro está.
Ciudad del Cabo, un lugar gay friendly
Actualmente, el 11% de los turistas que aterrizan en Ciudad del Cabo son turistas gays. Como hemos dicho, es una cifra lo suficientemente importante como para que el gobierno lo tenga en cuenta, ya que al final todo el dinero que nos gastamos en nuestros viajes se queda en el país y es bien acogido por ellos. Ciudad del Cabo es considerado prácticamente un oasis en pleno África, un continente que condena la homosexualidad en su práctica totalidad. Hay países en los que no es legal ser homosexual o parecerlo, y las condenas pueden y suelen ser brutales.
Pero Ciudad del Cabo rezuma modernidad y sin duda es la vía de entrada de la tolerancia y el respeto en una zona en la que lo tenemos muy difícil las personas LGBT. Les conquistamos por nuestro dinero, sí, pero al menos son conscientes y somos conscientes de ello.
El turismo gay en Sudáfrica
Ciudad del Cabo lucha por ofrecer más opciones a los turistas gays, y es que el turismo rosa no hace más que crecer en el mundo. Con las diferentes legislaciones que protegen y equiparan los derechos de las personas homosexuales con las heterosexuales, con la visibilidad de las personas trans, es algo que se tiene que acabar viendo en el propio turismo y en el día a día de las ciudades y capitales más conocidas del mundo.
En Ciudad del Cabo se pueden encontrar hasta 50 hoteles para público homosexual, 12 discotecas y clubes LGBT, 14 clubes sociales y 8 restaurantes. Ciudad del Cabo ha sabido adaptarse a lo que pedía la sociedad y, como decimos, aunque la aceptación incluya pasar por caja y ver nuestro dinero, sin duda es mejor eso que nada. Y si la ciudad se convierte en un ejemplo que transmite las bondades de respetar al prójimo y se puede estrapolar a otras ciudades de la zona, aún mejor.
La diversidad sexual en Sudáfrica
Como en cualquier país y en cualquier zona del mundo, la diversidad sexual también existe en Sudáfrica. Es una zona cuya historia es cuanto menos curiosa, ya que la intromisión del colonialismo británico y holandés, así como el Apartheid, con su correspondiente lucha por los derechos humanos influyeron mucho en la lucha LGBT, aunque fuera casi de rebote.
Derechos LGBT en Sudáfrica
Al caer el gobierno del Apartheid, Sudáfrica se convirtió en el primer país del mundo que prohibía explícitamente discriminar a las personas por su orientación sexual. Y por si faltaba poco, en 2006 fue el primero de su continente en legalizar el matrimonio gay, y el quinto del mundo. Es decir, que en Sudáfrica se toman muy en serio la lucha por los derechos de las personas, independientemente de su orientación sexual o raza.
Pero eso no quiere decir que todo sea perfecto en el país. La homosexualidad sigue sin estar bien vista entre gran parte de la sociedad, y a ello se une el machismo, de forma que las mujeres lesbianas son aún más castigadas por sus vecinos, amigos e incluso familiares. Muchas asociaciones LGBT critican que la policía no defiende a las mujeres en estos casos y por ello es una lucha que aún queda por llevar a cabo: el machismo y la homofobia siguen presentes en la sociedad sudafricana,
Por lo tanto, visitar Sudáfrica es sin duda visitar uno de los países con una legislación más avanzada en cuanto a derechos LGBT, pero su sociedad, especialmente en según qué zonas, necesita aún ser educada y aprender lo que significa el respeto y la tolerancia a las personas diferentes.
