Un ex pastor cristiano se declara culpable de matar a la mujer trans negra Kelly Stough
Un ex pastor se ha declarado culpable de asesinato en segundo grado y de un delito grave de arma de fuego en relación con la muerte de Kelly Stough, una mujer trans negra de 36 años, en 2018.
Albert Weathers, de 46 años, antiguo pastor de la Iglesia Bautista Logos de Detroit (Michigan), se declaró culpable de los cargos el jueves (27 de julio), informó Detroit News.
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Un portavoz de la fiscalía declaró al periódico que el caso se "ralentizó" debido a que los tribunales no celebraron juicios con jurado durante la pandemia de Covid-19, lo que significó que "su caso tardó más tiempo en pasar por el sistema".
Kelly Stough, nombrada en algunos informes como Keanna Mattel, fue asesinada a tiros en diciembre de 2018, y recordada por sus seres queridos como un "espíritu hermoso" y un "individuo dulce y cariñoso".
La policía cree que Weathers disparó a Stough y huyó del lugar del crimen para ir a trabajar. Al parecer, llamó a la policía poco después del tiroteo, alegando que alguien había intentado robarle y que había disparado al autor por accidente. Weathers fue detenido poco después en relación con el tiroteo.
Kyra Butts, una trabajadora sexual trans de la zona, testificó en 2019 que Weathers la veía con frecuencia a ella y a otras trabajadoras sexuales, pero que dejó de ver a Weathers porque le daba "largas" a la hora de pagarle.
"Su actitud era agresiva y algo intimidatoria", declaró Butts ante el tribunal.
Según los informes, Weathers se enfrentará ahora a ocho años de prisión por el cargo de asesinato y a dos años por el cargo de arma de fuego. La sentencia está prevista para el 8 de septiembre.
La fiscal Kym Worthy dijo en un comunicado: "Ella no será olvidada. Ella era importante. Seguiremos persiguiendo enérgicamente a quienes hacen daño a esta y otras comunidades del condado de Wayne".
'Tiene una familia que se preocupaba por ella'
Jessica Chantae Stough, madre de Kelly Stough, dijo en 2018 que Kelly y otras mujeres trans "no son desechables".
"Quiero que la gente sepa que el hecho de que fuera transexual no significa que no la quisieran, que no la cuidaran", afirmó.
"Tiene una familia que se preocupó por ella, que la quería, y quiero que sepan que las mujeres transexuales -expresamente las de color- no son desechables; la gente se preocupa por ellas".
Stough ya había hablado anteriormente de la violencia contra las personas trans en Estados Unidos y de la desconfianza de la comunidad hacia los agentes de policía.
"La policía desconoce nuestra lucha, por lo que no siente simpatía por nosotros", declaró a The Guardian en 2015, tras el asesinato de Amber Monroe, de 20 años, que también murió tiroteada en Detroit.
La Campaña de Derechos Humanos añadió en el momento de la muerte de Stough: "Debemos escuchar sus palabras y abordar los factores que siguen fomentando una epidemia de violencia contra las personas transgénero, en particular contra las mujeres transgénero de color.
"Está claro que la violencia mortal afecta de forma desproporcionada a las mujeres trans de color, y que las intersecciones de racismo, sexismo, homofobia y transfobia conspiran para privarlas de lo necesario para vivir y prosperar."