Un guardia de seguridad de McDonald's acosa a una mujer transexual
Una mujer trans dice que un guardia de seguridad masculino le pidió que "demostrara" que era mujer y que supuestamente la siguió hasta el baño de un McDonald's.
Paula Griffin, de 57 años, dice que el incidente ocurrió cuando entró en el baño de mujeres de un restaurante McDonald's en Peckham, Londres, el lunes (17 de octubre).
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En Twitter, Griffin dijo que un guardia de seguridad masculino la siguió hasta los baños, "gritó algo y luego exigió ver mi pasaporte cuando salí".
"Que se sintiera con el poder de hacer eso a cualquier mujer que no cumpliera con SUS criterios femeninos, da miedo", escribió.
Griffin presentó su pasaporte, que demuestra que es mujer, pero se quedó conmocionada por el incidente, según cuenta .
Posteriormente, los directivos intervinieron y la llevaron al exterior, donde le ofrecieron una "disculpa a medias" por el incidente.
La "cultura del acoso" en el Reino Unido
Griffin se fue a casa para "despejarse" y decidió presentar una queja a la empresa.
"Supuestamente lo están investigando, pero no estoy conteniendo la respiración", dice.
No es la primera vez que Griffin se enfrenta a abusos y comentarios sobre su identidad de género en lugares públicos.
Hace poco, un hombre le gritó en Peckham, y dice que un grupo de chicos la abucheó cuando jugaba al fútbol con su equipo femenino en Londres.
"Cuando me han hecho comentarios transfóbicos en la vida real, el 99% de las veces provienen de hombres, no de mujeres", dice Griffin.
"Creo que es una consecuencia de la cultura del acoso en este país.
"Gran parte del movimiento feminista crítico con el género está liderado por mujeres blancas de clase media que temen salir perdiendo frente a las mujeres más jóvenes y trans".
"Demonizado por los políticos".
Griffin ha regresado recientemente de un viaje a Perú, donde dice que pudo utilizar los aseos de mujeres en todas partes sin que nadie la mirara.
Además, ha podido seguir sus actividades "sin problemas" en otros países europeos que suelen considerarse más conservadores políticamente que el Reino Unido.
Griffin cree que el incidente del McDonald's se produjo como resultado directo de la intensa atención que los políticos y los medios de comunicación prestan a las mujeres trans en el Reino Unido.
"Como mujeres trans estamos siendo demonizadas en este país para obtener beneficios políticos", afirma.
En cuanto a las feministas "críticas con el género", dice: "Intentan excluirnos. No se preocupan por las instalaciones, no se preocupan por la financiación, no se preocupan por la representación, no se preocupan por el deporte femenino".
