Wayne Maines crió al primer superhéroe trans de la televisión

Nicole, la hija de Wayne Maines, fue la primera superheroína trans de la televisión en Supergirl, de The CW. Mientras el sentimiento anti-LGBTQ+ se intensifica en Estados Unidos, él lucha ahora por ayudar a los jóvenes trans a vivir su verdad.

Hubo un tiempo, no hace tanto, en que el llamado debate trans parecía confinado al cuarto de baño.

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A lo largo de la década de 2010, las personas trans y sus familias en estados desde Carolina del Norte hasta Virginia se dirigieron a los tribunales con una simple petición: poder usar el baño en paz.

Wayne Maines era uno de esos padres en primera línea de esa batalla.

En 2009, Wayne y su familia demandaron al distrito escolar de Orono, en Maine, su estado natal, con ayuda de la Comisión de Derechos Humanos de Maine. La hija trans de Maines, Nicole Maines, que entonces tenía 11 años y era melliza, había pasado dos años sin poder utilizar el baño de la escuela que correspondía a su sexo. Wayne estaba harto.

"Cuando empezamos este viaje, éramos prácticamente los primeros del país", cuenta. "Empezaron a atacar a mis bebés, y entonces me enfadé mucho. Empecé a contraatacar".

La lucha no fue fácil. En 2012, un juez del Tribunal Superior se puso del lado de la escuela de Nicole, argumentando que había "actuado dentro de los límites de su autoridad".

Nicole y su familia tardaron otros dos años y una apelación en alzarse con la victoria. Era la primera vez que un tribunal estadounidense declaraba ilegal negar a los estudiantes trans el acceso al baño que corresponde a su identidad de género.

Casi diez años desde que la familia Maine ganó su caso, y ha habido algunos avances positivos. Nicole, ahora actriz, se convirtió en 2018 en la primera superheroína trans de la televisión al asumir el papel de Nia Nal en Supergirl, de la cadena CW.

A pesar de la victoria, la experiencia quedó marcada. Maines fue tachado de "maltratador de menores" por testificar y apoyar a su hijo trans, mientras que su familia tuvo que dejar su trabajo y esconderse.

"Creo que tengo estrés postraumático. Fue una de las cosas más duras que he hecho, pero de las que más orgulloso me siento. Desde entonces estoy a bordo intentando ayudar a otras personas a hacer lo mismo".

Sin embargo, en los últimos años, la oposición al derecho de los niños trans a afirmar su identidad de género se ha extendido del baño a los campos de deporte y a las aulas, bibliotecas y sistemas sanitarios de todo Estados Unidos.

"Ahora, no sé qué ha pasado en este país. Hay tanto odio. Nunca pensé que fuera posible que avanzáramos tanto y luego retrocediéramos", dice Maines.

Maines habla a través de Zoom. Detrás de él, la gente se agita y hay un fuerte murmullo. El murmullo de voces jubilosas hace que parezca que está en un bar; en realidad, está en el Capitolio del Estado de Texas, a pocos minutos de unirse a un mitin.

"Me rompe el corazón ver a los niños venir aquí a pedir a los legisladores: 'dejadme ser quien tengo que ser'".

Más tarde, testificará contra el proyecto de ley 14 del Senado de Texas que, de aprobarse, bloqueará el acceso de los jóvenes trans a la atención sanitaria de afirmación de género. "Me rompe el corazón ver a estos chicos venir aquí y ponerse en peligro para testificar, para pedir a los legisladores 'dejadme ser quien necesito ser'".

Como parte de su defensa continua, Maines aparece en el nuevo e impactante documental de Luchina Fisher The Dads.

Concisa pero convincente, The Dads muestra a cinco padres de niños trans que se dirigen a la zona rural de Oklahoma en un viaje de pesca de fin de semana. Se les une Dennis Shepard -el padre de Matthew Shepard, asesinado en un célebre crimen de odio homófobo en 1998- para hablar del mundo en el que se encuentran como padres de niños LGBTQ+, mientras el odio anti-LGBTQ+ se intensifica en Estados Unidos.

La atención a los padres es intencionada. Fisher, que tiene un hijo trans, quería poner a los hombres en el centro de la narración. Considera que las mujeres y las madres son más visibles a la hora de defender los derechos LGBTQ+.

Cuando un niño pasa por una transición, todos los miembros de la familia pasan por ella", explica, "y creo que los padres entienden cada vez mejor que tienen un papel importante que desempeñar".

"Muchos de estos proyectos de ley y de la retórica del odio proceden de hombres. Sobre todo de hombres blancos, que intentan mantener algún tipo de control. Se necesita el contrapeso de estos hombres que hablan, y estos padres están en una posición única".

Fisher también quería que The Dads contara la historia "real" de lo que es para los padres de niños trans: el miedo, la incertidumbre, las carencias.

Al principio, Maines no podía enfrentarse a la experiencia de la identidad de género de Nicole con ella: "Tenía a esta niña diciéndome todos los días que no era un niño, que era una niña, y yo luchaba contra eso", dice, explicando cómo una experiencia cercana a la muerte, en la que la caída de una rama de un árbol no le alcanzó la cabeza por poco, le obligó a enfrentarse a su miedo.

"Empecé a hablar con otros padres sobre el tema y les dije: "Oye, ¿a qué le tienes miedo?".

"Por fin pude entender por qué tenía miedo de mi propio hijo".

Esa simple pregunta fue un catalizador no sólo para Maines, sino para los innumerables padres con los que ha hablado desde entonces y que se encuentran en una situación similar: "Empecé a hablar con otros padres sobre el tema y les dije: 'Escucha, ¿a qué tienes miedo?' Una vez que pudieron verbalizar a qué tenían miedo, entonces pudimos tener las conversaciones reales que necesitábamos tener".

Espera que The Dads ayude a la gente a afrontar y comprender los temores que tienen sobre los niños trans. También espera que muestre que él, como los otros padres de la película, quieren a sus hijos "tanto como los demás".

Maines acerca una foto de Nicole a su cámara web y empieza a reflexionar sobre el camino que podría haber tomado su vida si no hubiera recibido la atención médica de afirmación de género que recibió al crecer.

"Tiene un hermano gemelo idéntico. Si supiera que iba a parecerse a él, quizá no estaría aquí hoy", dice. "Si les quitan ese cuidado a estos niños..." Hace una pausa. "Algunos de ellos no van a estar aquí".

"¿Qué demonios están haciendo? Es insondable hasta qué punto están utilizando a nuestros hijos como peones políticos. Esto es simplemente desgarrador. Es malvado".

Maines se levantó para testificar contra el proyecto de ley 14 del Senado de Texas sabiendo que sólo disponía de unos minutos para intentar hacer cambiar de opinión a los miembros del comité del Senado. El proyecto de ley sigue adelante, como tantos otros en Estados Unidos.

Pero Maines no dejará de intentarlo: "Si podemos llegar a sus corazones, entonces podremos llegar a sus mentes, porque ahí es donde empieza todo".

The Dads se proyectará en el festival de cine LGBTQ+ BFI Flare de Londres el 25 de marzo.