Cómo afecta a tu vida en pareja la atracción estética
La atracción es una experiencia universal que nos impulsa a gravitar hacia determinadas personas. Por ejemplo, la atracción estética se refiere al deseo de mirar a alguien y admirar su aspecto sin querer necesariamente tener una relación con él.
Pero, ¿podemos sentirnos así sólo porque alguien nos parece atractivo? ¿Y qué importancia tiene ser estéticamente atractivo? ¿Cómo sabemos siquiera cuándo lo sentimos?
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La buena noticia es que no necesitas hacer un test de atracción estética ni ninguna prueba para entender por qué te resultan atractivas o no ciertas cualidades. Con nuestra guía, puedes aprender todo lo que necesitas saber sobre la atracción estética, cómo se diferencia de otras formas de atracción y lo que significa para tu vida de pareja.
¿Qué es la atracción estética?
La atracción estética implica sentirse atraído por el aspecto físico de una persona, lo que puede incluir una apreciación por su estilo, sus rasgos faciales, su figura o su aspecto general.
El término atracción estética se acuñó por primera vez en 2005 dentro de la comunidad asexual. Muchos asexuales experimentan un interés visual por el aspecto de una persona, pero no desean tener contacto sexual, físico o romántico con ella.
¿Cómo se siente la atracción estética?
La atracción estética se siente como un deseo magnético de mirar a alguien y admirar su aspecto físico. Algunos comparan esta sensación con la de ver una fotografía o un cuadro llamativo en el que no puedes evitar detenerte a mirar.
Cuando te sientes atraído por la estética, es posible que te sorprendas mirando a una persona durante un largo periodo de tiempo sin querer necesariamente acercarte a hablar con ella o entablar una relación con ella.
Atracción estética frente a atracción física: ¿Cuál es la diferencia?
La mayoría de la gente confunde la definición de atracción estética con la de atracción física, ya que hay bastante coincidencia entre ambas.
Como se ha mencionado, encontrar a alguien estéticamente atractivo se basa en la apreciación de las cualidades visuales de una persona. Por otro lado, la atracción física se refiere al deseo de compartir un espacio con alguien y tocarlo.
Sin embargo, algunas personas creen que la atracción física es un término general que incluye la atracción estética y la sensual. La atracción sensual es el deseo de tocar físicamente a alguien de forma no sexual, como por ejemplo cogerle la mano.
Atracción estética y atracción sexual: ¿Cuál es la diferencia?
En pocas palabras, uno experimenta atracción sexual cuando desea tener relaciones sexuales con otra persona. Curiosamente, puedes experimentar uno o ambos tipos de deseo sexual: atracción sexual objetiva y subjetiva.
Los sentimientos sexuales objetivos implican el deseo de tener relaciones sexuales con alguien considerado convencionalmente atractivo, aunque no te atraiga personalmente. Por su parte, los sentimientos sexuales subjetivos implican el deseo de tener relaciones sexuales con alguien que te parece atractivo, a pesar de que otras personas piensen lo contrario.
Otras formas de atracción que puedes sentir
Las personas pueden encontrar a alguien atractivo de más de una manera. Para ayudarte a entender todas las formas únicas en que la gente desarrolla la atracción, hemos hecho una lista de otros términos con los que puedes familiarizarte.
Atracción romántica
Experimentar la atracción romántica se define más fácilmente por el deseo de formar relaciones amorosas y románticas. Cuando se experimenta atracción romántica, se puede pasar por el típico proceso de salir, comprometerse y casarse.
Por ejemplo, alguien monógamo puede sentirse atraído románticamente por otra persona y mantener una relación romántica con ella. Por otro lado, alguien poliamoroso puede sentirse atraído románticamente por varias personas y establecer relaciones con todas ellas.
Además, la forma de experimentar la atracción romántica puede verse afectada por su orientación romántica. Por ejemplo, el término demiromántico describe a alguien que experimenta la atracción romántica sólo después de haber formado una conexión emocional con ellos.
Atracción emocional
Las personas que se sienten emocionalmente atraídas por alguien pueden mostrar admiración por su personalidad, su humor, sus valores o su actitud. La cercanía emocional presente en su relación fomenta la intimidad, lo que explica que muchas personas sientan una atracción romántica junto con su admiración emocional.
Atracción intelectual
Aunque no es tan común como la atracción romántica o sexual, la atracción intelectual es otra forma de experimentar una dimensión del deseo. Es el genuino aprecio por la capacidad de las personas para compartir conocimientos profundos o mantener conversaciones que invitan a la reflexión. A veces, lo que más atrae a la gente es entender cómo un individuo da sentido a la vida y al mundo que le rodea.
Atracción platónica
¿Alguna vez has querido hacerte amigo de alguien que acabas de conocer? Si es así, ¡así se siente la atracción platónica! Puede que no implique sentimientos intensos o el deseo de contemplar sus rasgos estéticos, pero es algo que casi todo el mundo experimenta.
Y cuando el deseo de entablar una amistad con alguien se convierte en una amistad genuina, se forma el amor platónico, que nos ayuda a sentirnos cálidos y valorados. Por ejemplo, en las relaciones queerplatónicas, un amigo es emocionalmente íntimo y afectuoso con sus amigos, aunque no se sienta atraído sexualmente por ellos ni esté interesado en mantener una relación romántica.
¿Es el atractivo estético importante para todos?
En absoluto. Cada persona tiene una serie de preferencias diferentes en cuanto al tipo de atracción que más valora, ya que los deseos no son necesariamente compartidos entre las personas. Por ejemplo, algunas personas pueden sentir un vínculo emocional y querer tener sexo con alguien, a pesar de no sentirse atraídas estéticamente. Por otro lado, otras pueden priorizar la estética o el atractivo físico sobre el atractivo intelectual y romántico.
Dato curioso: las personas no estéticas o anestésicas ni siquiera consideran necesario el atractivo estético para ser consideradas atractivas.
Cómo afectan la orientación sexual y la identidad de género a la atracción estética
Independientemente de su preferencia sexual o identidad de género, cualquier persona puede interesarse por la estética de un individuo. Algunas personas heterosexuales incluso han compartido que han pensado que alguien de su mismo sexo es estéticamente atractivo.
Como la apreciación de la estética es puramente visual, no cambia en absoluto tu preferencia sexual ni tu género. Si lo piensas, puedes considerar a tus amigos como personas estéticamente atractivas aunque no quieras establecer relaciones románticas y sexuales con ellos.
Como se ha mencionado, experimentar atracción sexual implica el deseo de tener sexo con alguien, y el atractivo romántico se refiere al deseo de involucrarse románticamente. Por lo tanto, su admiración por la estética de una persona no afecta directamente a su sexualidad ni a su género.
¿Puede la atracción estética convertirse en interés sexual?
Sí, es posible que la gente se sienta interesada estéticamente por alguien en un momento dado, y luego su percepción de ese alguien puede cambiar más adelante. En función de su sexualidad, alguien puede desarrollar o no el deseo de establecer un contacto sexual después de haber encontrado inicialmente a alguien estéticamente atractivo.
Por ejemplo, los alosexuales (personas cuya sexualidad implica la posibilidad de interesarse sexualmente) pueden encontrar estéticamente atractivos el pelo corto y los ojos marrones de una persona cuando la conocen por primera vez. Y después de pasar un tiempo con ellos, pueden encontrarlos sexualmente atractivos e interesarse por tener relaciones sexuales.
Sin embargo, los asexuales (personas cuya sexualidad no implica interesarse sexualmente) nunca encontrarán atractiva sexualmente ni siquiera a la persona más atractiva estéticamente. En cambio, si una persona es pansexual, puede percibir a alguien como estéticamente atractivo independientemente de su sexo y desarrollar un interés emocional, sexual o romántico.
Nos gusta lo que nos gusta
La clave para entender todas las formas de atractivo es recordar que experimentamos la atracción hacia las personas de forma subjetiva. El género, la sexualidad y las preferencias personales desempeñan un papel en el desarrollo de una guía mental que nos dice lo que nos gusta o no.
Mientras que algunos pueden sentirse atraídos estéticamente sin desarrollar una atracción sexual o romántica, otros pueden interesarse emocionalmente por alguien y desarrollar rápidamente sentimientos románticos. Al aceptar nuestras diferencias, podemos seguir difundiendo un mensaje de aceptación al reconocer todas las formas únicas en que nos interesamos por las personas.
