Destrozan a golpes una sede LGTB+ en Inglaterra
Una tienda de caridad que recauda fondos cruciales para causas LGBT+ en Blackpool, Inglaterra, ha sido objeto de vandalismo, dejando a su fundador "destrozado".
LGBT Charity UK en Talbot Road, que vende libros y bricolaje para recaudar dinero para la salud mental y el apoyo a la vivienda para la gente queer, fue atacado durante la noche del domingo (5 de septiembre), su fundador Juke Conway escribió en Facebook.
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Las ventanas del escaparate estaban cubiertas de grietas, según Conway, después de que alguien "atravesara el escaparate con el puño", dijo a The Gazette, un periódico de Blackpool.
El coste de sustituir el escaparate o de fortificarlo con tablones de madera es demasiado elevado, por lo que la tienda se ve obligada a buscar el dinero necesario para mantener el negocio.
"No puedo creer que nos hayan atacado de esta manera", dijo Conway. "No le ha pasado a ninguna otra tienda de la zona, sólo a nosotros".
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"Salí de la tienda a las 10:15 de la noche y en algún momento entre ese momento y cuando llegué a las 8:15 de la mañana, alguien había atravesado el escaparate y lo había destrozado por dos sitios", explicó Conway.
"No podemos conseguir que nadie venga a arreglarlo hasta el próximo jueves. Ni siquiera podemos tapiarlo a menos que estemos dispuestos a pagar otras 500 libras".
Conway confirmó que el incidente ha sido denunciado a la Policía de Lancashire, el cuerpo de policía del condado, y que se ha hecho un llamamiento al público para cubrir los costes de la reparación -sólo las reparaciones de las ventanas ascienden a 600 libras, dijo.
"Nos sentimos destripados", añadió. "Por desgracia, no tenemos ninguna cámara de seguridad que cubra esa zona de la tienda".
El ataque se ha producido en medio de un fuerte repunte de los delitos de odio contra las personas LGBT+ que asolan Inglaterra desde hace años, y que han alcanzado cotas tan aterradoras que la policía está investigando unos siete delitos transfóbicos al día.
Pero los expertos subrayan que estas cifras, ya de por sí vertiginosas, siguen subestimando el problema. Al menos el 80% de las víctimas de delitos de odio LGBT+ siguen dudando en denunciar los ataques a las autoridades, según datos de Stonewall.
"Lo que me molesta es que a menudo viene gente a la tienda y se lleva cosas sin pagar", añadió Conway, "no me molesto en denunciarlo y en cambio pongo mi propio dinero en el bote".
"Ahora que ha pasado esto, me pregunto cuánto dinero se puede poner para que todo siga funcionando".