El comisario de Derechos Humanos de Canadá dimite en protesta contra el proyecto de ley que restringe los derechos de los niños trans
Una comisaria de derechos humanos canadiense ha dimitido después de que el gobierno de su provincia dijera que utilizaría una cláusula de su constitución para aprobar una ley que impidiera a los menores de 16 años cambiar de nombre o de pronombre en la escuela sin el consentimiento de sus padres.
En una carta dirigida al primer ministro derechista de Saskatchewan, Scott Moe, en la que presenta su dimisión inmediata, Heather Kuttai -que tiene un hijo trans- afirma que la decisión de dimitir no se ha tomado a la ligera, sino porque el proyecto de ley es "un ataque a los derechos de los niños trans, no binarios y de género diverso".
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La política es algo de lo que ella "no puede formar parte", y no quería estar "asociada con un gobierno provincial que quita derechos a los niños, especialmente a los niños vulnerables", añadió.
"Los derechos de un niño deben primar siempre sobre las obligaciones y responsabilidades de los padres. Mi primera preocupación es que este proyecto de ley va a perjudicar a los niños".
El proyecto de ley 137, conocido como la Carta de Derechos de los Padres, fue presentado la semana pasada por el ministro de Educación del Partido de Saskatchewan, Jeremy Cockrill, y describe una serie de derechos que tienen los padres en relación con la educación de sus hijos. Entre ellos figuran el acceso al expediente escolar del alumno, poder ver qué contenidos de salud sexual se imparten y ser informados del rendimiento y la progresión académica de sus hijos.
"Los padres deben participar siempre en las decisiones importantes que afectan a sus hijos", declaró entonces Cockrill.
"La política de inclusión y consentimiento de los padres introducida en agosto y esta legislación que presentamos hoy garantizarán que siga siendo así".
Saskatchewan dejará de ser un lugar que cuida de todos sus niños
El proyecto de ley invoca el artículo 33 de la Carta Canadiense de Derechos y Libertades, una cláusula que otorga a las legislaturas provinciales la capacidad de anular partes de la Carta durante un periodo de cinco años.
La ex tiradora paralímpica Kuttai, medallista en Seúl y Barcelona, explicó que su decisión de dimitir se debía a que tiene un hijo transgénero, lo que convierte la política -a la que se habría opuesto de todos modos- en un "problema mayor" para su familia.
"Una de las razones por las que ahora está fuera, y prosperando, es por el apoyo que recibió en la escuela", escribió Kuttai en su carta de dimisión.
"No puedo ser una buena ciudadana de esta provincia, no puedo ser una comisaria que defienda los derechos humanos, no puedo ser la madre -una buena madre- de un niño trans si me quedo de brazos cruzados y dejo que esto ocurra", afirmó.
En una entrevista con The Canadian Press, Kuttai, que fue nombrada miembro de la Comisión de Derechos Humanos de Saskatchewan en 2014, describió cómo la política se sentía "personal" y le hizo darse cuenta de que "no podía seguir formando parte de un sistema que es fundamentalmente antitrans".
Si se aprueba la ley, "Saskatchewan dejará de ser un lugar que cuida de todos sus niños", afirmó.
"Esta es la única provincia de Canadá donde los derechos de los niños LGBTQ+ no son los mismos que los de otros niños de este país. Todos nacemos en este país con derechos. Eso es parte de lo que hace grande a este país. No somos dueños de nuestros hijos".
Me metí en política porque, como madre preocupada, quería participar más en la educación de mis hijos.
Este proyecto de ley no aumenta la participación de los padres en la escuela.
Solo quita derechos a un grupo vulnerable de estudiantes.#skpoli #cdnpoli #skEd pic.twitter.com/rG0ZePMuwT-
Carla Beck (@CarlaBeckSK) 14 de octubre de 2023
Carla Beck, líder del opositor Nuevo Partido Democrático de Saskatchewan, compartió un vídeo en el que denunciaba la política: "Me metí en política porque, como madre preocupada, quería participar más en la educación de mis hijos.
"Este proyecto de ley no aumenta la participación de los padres en la escuela, sólo quita derechos a un grupo vulnerable de estudiantes".
