El legislador de la ley "no digas gay" de Florida se enfrenta a cargos penales
Joe Harding, artífice de la denostada ley de Florida "No digas gay", se enfrenta a cargos penales por presunto fraude en préstamos de ayuda de COVID.
El representante republicano de Florida Harding patrocinó el proyecto de ley Don't Say Gay (No digas gay), que entró en vigor en julio.
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Según la ley, los profesores de centros públicos tienen prohibido tratar temas LGBTQ+ con los alumnos.
Horrorosamente, la legislación final era en realidad una versión suavizada del plan original de Harding, que incluía obligar por ley a los profesores a sacar del armario a sus alumnos LGBTQ+, una enmienda que se vio obligado a retirar.
Sin embargo, a pesar de pintarse a sí mismo como "un defensor de los derechos de los padres" y una imagen de la moralidad, que quiere ser "un ejemplo para la nación" con su legislación anti-LGBTQ+, Joe Harding se enfrenta ahora a cargos penales.
Según Advocate, se enfrenta a seis cargos, entre ellos blanqueo de capitales, declaraciones falsas y dos cargos de fraude electrónico. Los fiscales federales alegan que intentó defraudar a la Administración de Pequeñas Empresas obteniendo préstamos de ayuda COVID bajo falsos pretextos.
Según la acusación, hecha pública el lunes (5 de diciembre) por la Fiscalía del Norte de Florida, Harding habría recibido 150.000 dólares de la Agencia Federal para el Desarrollo de la Pequeña Empresa utilizando nombres de empresas inactivas y creando extractos bancarios falsos.
Harding niega las acusaciones y dijo en un comunicado: "Hoy me he declarado inocente de los cargos federales que afirman que obtuve y utilicé indebidamente un préstamo EIDL concedido por la Administración de Pequeñas Empresas. Quiero que el público y mis electores sepan que devolví íntegramente el préstamo y cooperé con los investigadores como se me pidió".
"Por consejo de mi abogado, no podré decir nada más específico sobre los procedimientos legales hasta una fecha posterior y remito cualquier pregunta o preocupación relacionada con este asunto a mi abogado. Les pido que me tengan a mí y a mi familia en sus oraciones mientras trabajamos por una resolución justa y equitativa. Gracias y que Dios les bendiga".
De ser declarado culpable de los seis cargos, el creador de la ley "No digas gay" se enfrentaría a una pena máxima total de 70 años de prisión.