Este estudio sobre hombres que se masturban juntos llegó a conclusiones interesantes
Hombres HETEROS que se MASTURBAN juntos: alucina con los datos de este estudio.
Kyle Mustain llevó a cabo un estudio informal de casi 87.000 usuarios de Bateworld, una página web conocida como el "Facebook para masturbadores", para entender mejor a los autoproclamados hombres "heterosexuales" de la web que, sin embargo, disfrutan masturbándose con otros hombres.
Un nuevo estudio sobre el uso del preservativo entre hombres homosexuales revela algunas conclusiones sorprendentes y alarmantes
Los heteros que se masturban juntos dicen que no es gay
Mustain estimó que entre el 15 y el 30% de los usuarios de Bateworld probablemente se identifican como heteros: esto incluye a algunos de los bisexuales de la web que podrían estar dentro del armario públicamente, así como a algunos del 5% de los usuarios que "prefieren no decir" su orientación sexual.
Luego utilizó los cuestionarios creados por los usuarios de Bateworld para hacer preguntas como: "¿Es gay la masturbación mutua?"
Para su primera pregunta, el 82% de los 565 encuestados dijeron que la masturbación mutua no es gay. Para su segunda pregunta, la mayoría de los hombres dijo que "besar a otro hombre" e "involucrarse emocionalmente con una pareja sexual masculina" son las cosas más gay que se pueden hacer con otro hombre. Para su tercera pregunta, sólo el 1% dijo que "[los vídeos para adultos heterosexuales son] lo único que usan" cuando se masturban con otros hombres - los otros encuestados atribuyeron diferentes grados de importancia a los vídeos para adultos durante sus pajas.
"Según estas respuestas" escribió Mustain,"tocar un pene no es gay; los labios que tocan otros labios de hombre son gay; y tener sentimientos por otro hombre es realmente gay."
Continúa diciendo: "Puede ser interesante ver a los hombres heteros debatir la diferencia entre tocar tu propio pene y el de otro, escuchar a cada uno barajando lo lejos que llegará, y si la doble penetración o el uso de un masturbador en un amigo es gay".
En su artículo, Mustain hace referencia al libro de 2015 de la socióloga Jane Ward, Not Gay: Sex Between Straight White Men, en el que Ward dice que los hombres blancos heterosexuales que tienen encuentros sexuales con otros hombres a menudo emplean "accesorios, trajes y diálogo" que aparentemente mantienen su heterosexualidad en lugar de amenazarla.
"Se emborrachan y se drogan, ven porno heterosexual y hablan de chochos", escribe Jane. "Se basan en gran medida en el modelo de la amistad adolescente, o en la presumiblemente insignificante y sexual masturbación en grupo. [También mencionan] comentarios nostálgicos sobre ser amigos o colegas y compartir experiencias de unión masculina legítimas..."
Mustain concluye: "Lo que he encontrado en Bateworld es que estas líneas entre 'sólo bromear' y 'algo gay' y 'OK, eso es realmente gay' son realmente superficiales e imaginarias". Dice que también se basan en un mundo heterocentrista en el que la palabra" heterosexual" es vista como la predeterminada.
Mustain no es la primera persona que profundiza en este tema.
En 2016 un estudiante de doctorado en sociología de la Universidad de Oregon entrevistó a 19 hombres que utilizaron la sección de encuentros casuales M4M de Craigslist sobre sus hábitos sexuales e identidades. Descubrió que usaban términos como "sexo entre amigos", "heteroflexible", "sexo entre amigos", "ayudar a un amigo a liberarse" y aliviar los "impulsos" para enmarcar su deseo. También descubrió que estos hombres a menudo buscaban hombres "heterosexuales" y casados, rechazando a hombres afeminados o atractivos para evitar cualquier lío romántico o emocional que pudiera complicar sus vidas cotidianas.
En 2017 Ritch C. Savin-Williams, profesor emérito de psicología del desarrollo en la Universidad de Cornell, describió un grupo creciente de hombres "en su mayoría heterosexuales" que se sienten más cómodos con su atracción hacia el mismo sexo. Sin embargo, incluso estos hombres rechazan la etiqueta de "demasiado gay" por su orientación predominantemente heterosexual.
Es importante recordar que un hombre puede tener una experiencia del mismo sexo sin tener que identificarse como gay o bisexual, así como muchos hombres homosexuales han tenido experiencias con mujeres sin identificarse como heterosexuales. Más bien, nuestra preocupación por las identidades sexuales sólidas podría ser el resultado del heterocentrismo social y la homofobia, más que una necesidad inherente de identificarnos de una manera u otra.
Incluso los expertos evitan asignar orientaciones sexuales a los animales, prefiriendo decir que algunas criaturas exhiben comportamientos sexuales del mismo sexo o de diferente sexo por un tiempo determinado. Esto permite una mayor flexibilidad y precisión que las orientaciones sexuales rígidas.
