Hablemos de Queerbaiting
Tradicionalmente, la cuestión se ha aplicado sólo a los personajes de ficción, pero ¿pueden los famosos queerbaitearnos también a nosotros?
En los últimos años, cada vez más famosos han sido acusados de queerbaiting a sus fans. Lo que empezó como una forma de identificar y denunciar una obra de ficción por presentar falsamente a personajes o historias como queer para aumentar su audiencia, ha llevado ahora a acusar a algunos famosos de ese mismo falso marketing. En algunos casos, estas acusaciones han obligado a algunos artistas a salir del armario antes de tiempo.
El deseo de denunciar a los famosos que supuestamente hacen "queerbaiting" se ha convertido casi en una obsesión para algunos, con comunidades online enteras dedicadas a ello, pero ¿se puede utilizar éticamente para denunciar a figuras públicas como actores y músicos del mismo modo que se utiliza para denunciar a personajes de ficción? Parece que hay una línea que se cruza cuando exigimos lo mismo a personas reales, lo que hace que el debate sobre lo que es y lo que no es queerbaiting sea más complejo que nunca.
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Queerbaiting es un término y una táctica de marketing en la que se insinúa un personaje o una historia 2SLGBTQI+ sin llegar a identificar claramente a un personaje como queer. El término se popularizó en la década de 2010 entre los fandoms en línea, sobre todo en series de televisión como Sobrenatural y Sherlock. En realidad, el queerbaiting se ha utilizado durante décadas como una forma de comercializar obras de ficción (incluidos libros, programas de televisión y películas) para personas queer, atrayéndolas con arte con el que pueden conectar e identificarse, al tiempo que atrae a un público heterosexual.
Seamos realistas. Es un asco. No sólo puede hacer que los fans queer sientan que sus historias no son lo suficientemente importantes como para ser contadas, sino también que en realidad sólo están siendo utilizadas para hacer más dinero para alguien más. En estos casos, es necesario denunciar el queerbaiting. Las series y películas que utilizan el queerbaiting refuerzan la idea de que las identidades y narrativas queer no son dignas de ser protagonistas de sus propias historias. Denunciar estas series también ha creado una demanda de programas que den prioridad a las historias y personajes queer, y como resultado, programas como Our Flag Means Death de HBO y la adaptación de Heartstopper de Netflix han cambiado por completo la forma en que consumimos medios queer.
A medida que crece la necesidad de una representación queer genuina y sin disculpas en los medios de comunicación convencionales, los artistas también han sido objeto de acusaciones de "queerbaiting". Músicos como Nick Jonas, Ariana Grande, Billie Eilish y Harry Styles han sido señalados por frecuentar bares gays en su tiempo libre, por letras o pies de foto de Instagram que insinúan que forman parte de la comunidad queer o (en el caso de Harry Styles) por llevar un vestido en la portada de Vogue. Cuando se les ha preguntado, todos estos artistas han hecho declaraciones vagas sobre su sexualidad.
Y luego hay toda una comunidad en línea dedicada a averiguar si Taylor Swift es queer. Los fans pasan horas diseccionando y descifrando las letras de las canciones que coinciden con la narrativa queer que han extraído de su trabajo a lo largo de toda su carrera. Swift, que "salió del armario" como una fuerte aliada y defensora de la comunidad LGBTQ+ durante la promoción de su álbum Lover , ha guardado bastante silencio sobre los problemas actuales que enfrentan las personas queer y trans desde el lanzamiento del álbum en 2019. Su uso del término "Lavender Haze" en el lanzamiento de su álbum Midnights le valió una gran cantidad de reacciones negativas de su base de fans queer, que creían que los estaba queerbaiting después de que revelara que el significado de la canción era una Mad Menreferencey no un guiño a la lavanda que ha sido durante mucho tiempo un símbolo de la comunidad gay y lesbiana. Aparte de una entrevista en la que se declara aliada, Swift nunca ha hecho comentarios públicos sobre su sexualidad ni ha respondido a las acusaciones de queerbaiting.
Para muchos fans, existe una delgada línea entre lo que podría ser codificación queer y queerbaiting cuando se trata de lo que llevan estas celebridades, o de leer entre líneas sus letras, lo que hace que acusarles de queerbaiting sea más complicado. ¿Están insinuando a sus fans que son como ellos? ¿O simplemente adoptan una estética para vender más discos? En la mayoría de los casos, aparte de una vaga declaración sobre "no etiquetarse a sí mismos", permanecen en silencio, pero a veces el empuje de las acusaciones llega tan lejos que los famosos sienten que no tienen más remedio que responder.
Tras el estreno de Heartstopper en Netflix en 2022, algunos fans de la serie se obsesionaron con averiguar si la química en pantalla de los actores se traducía en relaciones en la vida real entre bastidores. Cuando empezaron a circular por Internet fotos de uno de los protagonistas de la serie, Kit Connor, cogido de la mano de una compañera de reparto de otro proyecto, varios fans empezaron a preguntarse si era una elección adecuada para seguir interpretando a Nick Nelson, ya que era "obviamente heterosexual", e incluso un pequeño número de fans pidió que se volviera a elegir el papel. Connor, que había abandonado Twitter debido a la toxicidad del fandom de Heartstopper , regresó para revelar que, al igual que el personaje que interpreta, es bisexual. En su declaración, también se aseguró de hacer saber a ciertos fans que le habían empujado a salir públicamente del armario antes de que él quisiera.
Esto fue decepcionante por varias razones. La sexualidad de Connor no es realmente asunto nuestro, y tampoco se nos debe ningún tipo de explicación o declaración sobre su vida personal. Connor interpretaba a un personaje como su trabajo, y estos supuestos fans se habían perdido por completo todo el mensaje de la serie. Lo que le ocurrió a Connor dejó huella en los fans de las comunidades en línea, y muchos siguen utilizándolo como ejemplo de advertencia cuando otros intentan husmear en la vida personal y las relaciones de otros artistas.
Puede llegar a ser increíblemente frustrante ver a figuras públicas que aparentemente utilizan a la comunidad queer como un plan de marketing para sacar provecho de lo que sea que estén vendiendo. La representación de las identidades queer en la cultura pop dominante es ahora más necesaria que nunca, pero la búsqueda de una representación genuina puede llevarnos a un terreno peligroso si no tenemos cuidado. Como personas queer, sabemos que puede haber factores que influyan en la decisión de alguien de no salir del armario públicamente. ¿Se están sumergiendo claramente en la cultura queer y la usan como disfraz para vendernos algo? ¿O, por el contrario, sólo comparten pequeñas partes de su verdadero yo como protección? Puede que nunca obtengamos respuestas claras, pero en lo que queda de 2023 y de cara a un nuevo año también tenemos la oportunidad de ensalzar a los famosos y las historias que son descaradamente queer y esperar que en algún momento del futuro el queerbaiting sea cosa del pasado.
