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Harley-Davidson, condenada por distanciarse de las iniciativas sobre diversidad tras las críticas recibidas

"HARLEY-DAVIDSON PARECE HABER OLVIDADO QUIÉNES SON SUS PRINCIPALES CLIENTES"

Harley-Davidson, condenada por distanciarse de las iniciativas sobre diversidad tras las críticas recibidas

Harley-Davidson se ha convertido en la última marca en abandonar sus compromisos en materia de diversidad, equidad e inclusión (DEI).

Los fabricantes de motocicletas estadounidenses se convirtieron en el centro de la ira de la derecha en julio, después de que el experto conservador Robby Starbuck suscitara la indignación por la promoción de los esfuerzos de la DEI, en un post que obtuvo más de tres millones de visitas en X/Twitter.

"Harley-Davidson parece haber olvidado quiénes son sus principales clientes", dijo Starbuck. "No creo que los valores de la empresa reflejen los valores de casi ningún motorista de Harley-Davidson.

"¿Quieren los usuarios de Harley que el dinero que gastan sea utilizado por las empresas para impulsar una ideología diametralmente opuesta a sus propios valores?".

En las últimas semanas, Starbuck también ha atacado a la cadena de tiendas rurales Tractor Supply y al gigante de la fabricación de tractores John Deere, y este último ha acabado abandonando los planes de inclusión de personas LGBTQ+.

En respuesta a la reacción, Harley-Davidson emitió una declaración en X el lunes (19 de agosto), diciendo que es "el papel de cada líder asegurar que tenemos una base de empleados que refleje a nuestros clientes y las geografías en las que operamos", añadiendo: "Dicho esto, no hemos operado una función DEI desde abril de 2024, y no tenemos una función DEI hoy. No tenemos cuotas de contratación y ya no tenemos objetivos de gasto en diversidad de proveedores."

Sólo se impartirá formación a los empleados "relacionada con las necesidades de la empresa" y "sin contenidos de motivación social".

Y en una clara referencia a la campaña de Starbuck's, añadía: "Nos entristece la negatividad en las redes sociales durante las [últimas] semanas, diseñada para dividir a la comunidad Harley-Davidson. Como empresa, nos tomamos este asunto muy en serio, y es nuestra responsabilidad responder con claridad, acción y hechos."

La Campaña de Derechos Humanos (HRC) condenó la respuesta de la empresa, acusándoles de ceder a la "presión de los extremistas de derechas MAGA" y de "poner la política por delante de los trabajadores y motociclistas al retirarse de los valores de diversidad, equidad e inclusión".

Eric Bloem, vicepresidente de programas y defensa corporativa de HRC, ha declarado: "Las decisiones de recortar las iniciativas de diversidad, equidad e inclusión envían una clara señal a los empleados de que a sus empleadores sencillamente no les importa la igualdad en el lugar de trabajo.

"Poner la política por delante de los trabajadores y los consumidores solo perjudica a las mismas personas de las que dependen estas empresas. La decisión de Harley-Davidson de retirarse del Índice de Igualdad Corporativa es una decisión impulsiva alimentada por actores marginales de derechas y extremistas de MAGA que creen que pueden intimidar a su manera para desmantelar iniciativas que ayudan a todos a prosperar en el lugar de trabajo.

"Con casi el 30% de la Generación Z identificándose como LGBTQ+, y la comunidad ejerciendo 1,4 billones de dólares (1,075 billones de libras) en poder adquisitivo, retroceder en estos principios socava tanto la confianza del consumidor como el éxito de los empleados."

Los compromisos con la diversidad se han convertido últimamente en un tema candente en la política estadounidense, con grupos e individuos contrarios a LGBTQ+ boicoteando a varias empresas por apoyar a grupos minoritarios.

El año pasado, Bud Light se convirtió en el ejemplo más notable después de que la marca de cerveza colaborara con el influencer trans Dylan Mulvaney.

Los derechistas boicotearon la cerveza, y algunos rompieron botellas en las estanterías de los supermercados, mientras que el músico Kid Rock incluso grabó un vídeo en el que aparecía disparando a las latas.

Después de que la empresa matriz Anheuser-Busch InBev informara de que las ventas de la cerveza en EE.UU. habían caído drásticamente, los jefes de Bud Light dijeron que la marca "se mantendría en nuestro carril".

 

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