La fot贸grafa Zanele Muholi pone sus ojos en los homosexuales negros
Zanele Muholi, originaria del municipio sudafricano de Umlazi, lleva desde principios de la década de 2000 explorando historias africanas queer a través de la fotografía y la creación de imágenes. Muholi es una galardonada activista visual cuyo trabajo se centra en la raza, la sexualidad y la identidad. Aunque su obra más destacada, Faces and Phases (Rostros y fases), cuyo objetivo era defender las injusticias sociales contra las personas trans, lesbianas y queer negras tras el régimen del apartheid, se expuso entre 2006 y 2014, su trabajo continúa en la actualidad.
"Nací en pleno apartheid. Muchas de las imágenes que vi expuestas eran sobre todo imágenes de mujeres llorando y yo no quería limitarme a sostener una pancarta y corear. Quería llevar una cámara y documentar cada momento", dice Muholi. "Se trataba de visibilidad y eso es exactamente lo que hice, capturé imágenes crudas que cuentan historias".
Zanele Muholi, fot贸grafa y activista sudafricana
Lo que Qatar podr铆a aprender de los retratos LGBTQ+ de Zanele Muholi
Cuando se le preguntó por la evolución de sus súbditos a la hora de captar imágenes, Muholi dijo: "Elijo romper estas jerarquías. Llamar sujetos a las personas ya es una jerarquía. No hay sujeto porque las personas fotografiadas son los reyes y reinas que definen lo que hacemos. Ellos son los que deben estar en lo alto del pedestal porque, sin ellos, no hay fotografías".
Muholi habla de cómo las personas LGBTQI+ negras sólo son noticia cuando hay una tragedia. La gente confunde la vida de los homosexuales con una vida muy influenciada por los medios de comunicación e Internet, lo cual no es cierto: "Ya es hora de que eso cambie. Ser queer es algo que siempre ha existido. Ya es hora de que tengamos un museo en África dedicado a las vidas queer y trans, porque ya no existimos en la sombra. Esto quiere decir que somos más que capaces de escribir nuestra propia historia y validar nuestra propia existencia".
Con su serie más reciente, Somnyama Ngonyama (que se traduce vagamente como "Salve, la leona oscura"), el fotógrafo creativo gira la cámara hacia ellas convirtiéndolas a la vez en creadoras de imágenes y participantes. En esta serie, el tono oscuro de su piel está muy exagerado. Muholi afirma que el único propósito de exagerar los retratos era resaltar el orgullo que sienten por su negritud. También dicen que toda la serie está relacionada con el concepto de MaID ("Mi identidad") o, dicho de otro modo, "criada", el nombre cotidiano y degradante que se da a todas las mujeres negras serviles en Sudáfrica.
La obra de Muholi es una poderosa declaración que ha llegado a las masas y perdurará para la próxima generación. No solo para la minoría LGBTQI+, sino para todos aquellos que quieran cambiar los sistemas políticos y culturales.