Los médicos recibirán un borrador orientativo sobre el embarazo trans
Se ha publicado un revolucionario proyecto de directrices para obstetras y ginecólogos sobre la atención a personas trans, no binarias y de género diverso.
Según el Real Colegio de Obstetras y Ginecólogos, muchas personas trans "tienen necesidades específicas de atención sanitaria obstétrica y ginecológica", incluida la atención relacionada con el parto, la anticoncepción, la fertilidad, la alimentación infantil, los procedimientos ginecológicos y la atención del cáncer.
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Sin embargo, el nuevo proyecto de directrices del colegio admite que estas necesidades no se están incluyendo de forma sistemática en la formación y el desarrollo profesional de los profesionales sanitarios.
El documento pretende colmar esta laguna, apoyando a "los profesionales de la salud para que presten una atención inclusiva y accesible para todos".
Algunas de las principales recomendaciones se refieren a la atención de las personas embarazadas, e incluyen la discusión de las opciones de preservación de la fertilidad con quienes desean someterse a una transición médica, "independientemente de su expresión de género", así como preguntar a los hombres trans sobre su forma preferida de alimentar a sus bebés.
"A los hombres trans que decidan alimentarse por el pecho, ofrézcales apoyo para la alimentación por el pecho de la misma manera que a las mujeres cis", dice la guía.
También recomienda que los obstetras y ginecólogos se tomen el tiempo necesario para conocer las barreras sanitarias a las que se enfrentan las personas trans, no binarias y con diversidad de género, la importancia de respetar las preferencias de los pacientes en cuanto a pronombres, títulos, nombres y relaciones familiares, y los "factores contextuales que pueden afectar al bienestar individual y a los resultados de salud".
A lo largo de la carrera de un médico, como señala Phil Rolland, ginecólogo oncólogo consultor que ha trabajado en la guía: "Es muy probable que si un obstetra o ginecólogo no ha consultado o tratado ya a un paciente trans o de género diverso, sea sólo cuestión de tiempo que lo haga".
El documento abarca recomendaciones en todo el espectro de la atención ginecológica, desde la evaluación de las causas de la disfunción sexual hasta el diagnóstico del cáncer después de una vaginoplastia, pasando por el modo en que los profesionales pueden actuar de enlace con los servicios de identidad de género.
El proyecto de directrices estará abierto a consulta hasta el 6 de septiembre.
Lamentablemente, las personas trans y de género diverso dicen que a menudo se sienten juzgadas e incomprendidas por el servicio de salud. Esto puede suponer una barrera para ellos a la hora de acceder a una atención vital, y nosotros, como profesionales sanitarios, tenemos un papel que desempeñar para que se sientan escuchados y reconocidos.
Este proyecto de directrices es nuestro primer intento de garantizar que ofrecemos una atención personalizada a todos nuestros pacientes. Agradecemos los comentarios sobre este borrador para garantizar que la directriz sea lo mejor posible para los médicos y las personas trans y de género diverso que utilizan nuestros servicios.
