Lula critica a Bolsonaro durante su toma de poder en Brasil
Luiz Inácio Lula da Silva afirmó que la "pesadilla ha terminado" al jurar su cargo como presidente de Brasil, en una evidente pulla a su predecesor de derechas y "orgulloso homófobo" Jair Bolsonaro.
El Presidente de izquierdas, conocido como Lula, se dirigió a una multitud de partidarios en Brasilia tras jurar su cargo el domingo (1 de enero), prometiendo introducir políticas medioambientales y proyectos de ley de justicia social tras "uno de los peores periodos de la historia brasileña".
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El veterano político, que fue presidente entre 2003 y 2010, no nombró a Bolsonaro, pero añadió: "[Fue] una época de oscuridad, incertidumbre y gran sufrimiento... pero esta pesadilla ha terminado".
"A nadie le interesa que nuestro país esté en constante ebullición.
"No hay dos Brasiles. Somos un solo pueblo".
Lula, de 77 años, rompió a llorar al hablar de la pobreza como el "crimen más grave cometido contra el pueblo brasileño".
"Las mujeres rebuscan en la basura para alimentar a sus hijos... Familias enteras duermen a la intemperie, expuestas al frío, la lluvia y el miedo".
Dirigiéndose al Congreso tras su ceremonia de investidura, Lula calificó los comentarios del gobierno anterior sobre el COVID-19 -Bolsonaro calificó las máscaras de "gay" y se negó a usarlas- de "comportamiento criminal de un gobierno negacionista y oscurantista que trató la vida de las personas con insensibilidad".
Dia 1 ❤️
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Lula (@LulaOficial) 2 de enero de 2023
Tras su ajustada derrota en las elecciones de octubre, Bolsonaro -el primer presidente desde la década de 1990 que no logra un segundo mandato- se negó supuestamente a entregar su banda presidencial a Lula, como es tradición democrática.
La organización internacional de derechos humanos Human Rights Watch (HRW) pidió al presidente que revierta las "políticas dañinas" de Bolsonaro y que haga avanzar a Brasil en materia de derechos humanos, especialmente para los de las comunidades marginadas.
Juanita Goebertus, directora para las Américas de HRW, dijo: "Bolsonaro fue un desastre para los derechos humanos, tanto dentro como fuera del país.
"Lula debe comenzar a trabajar en un plan para revertir las políticas perjudiciales del presidente Bolsonaro en las áreas de seguridad pública, medio ambiente y derechos de las mujeres, LGBT e indígenas, entre otros, y comenzar a llevar a cabo ese plan tan pronto como asuma el cargo el 1 de enero de 2023."
HRW pidió específicamente a Lula que hiciera más accesible el aborto después de que Bolsonaro desmantelara el derecho al aborto durante su mandato, así como que frenara los asesinatos policiales.
"Lula debe colocar los derechos humanos en el centro de sus políticas en el país y en el extranjero, y defender los derechos de todos, sin discriminación", agregó Goebertus. "Eso sería un cambio radical con respecto al gobierno de Bolsonaro".
